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 domingo, 02 de mayo de 2004

La ONG La Comuna hizo una encuesta entre usuarios de la K
Los rosarinos quieren ver más líneas de trolebuses en la calle
El 90 por ciento de los pasajeros destacó la frecuencia y rapidez de los troleys

Nueve de cada diez rosarinos quiere que se rehabiliten nuevas líneas de trolebuses ya que consideran que tienen buena frecuencia, recorridos directos y que los coches son rápidos y ecológicos. Al menos esto es lo que manifestaron en una encuesta que realizó la Asociación Civil La Comuna entre una centena de usuarios de la línea K. Con este material, la organización acompañó su propuesta para el restablecimiento de la vieja línea M de trolebuses que, hasta 1984, unió la ciudad de norte a sur.

"Con el transporte eléctrico los usuarios ganan en calidad de vida: no contaminan el ambiente, son rápidos y silenciosos", sostuvo el titular de La Comuna, Carlos Comi.

Su apreciación coincide con los resultados de un sondeo que la asociación realizó a mediados de abril entre 100 personas -60 mujeres y 40 varones- que frecuentemente viajan en la línea K. La encuesta se realizó en distintas paradas de la zona oeste, el centro y la ciudad universitaria.

El objetivo del sondeo fue conocer la opinión de los usuarios sobre la calidad del servicio que ofrece la empresa de troleys. Y, según parece, la K pasó la prueba.

El 29% de los entrevistados consideró que el servicio que presta es "muy bueno", el 50 % lo tildó de "bueno", mientras que el 17% lo calificó de "regular".

Entre las ventajas ofrecidas por este medio de transporte, sus usuarios destacaron que es ecológico (35,5%), que el recorrido es extenso y directo (22,1%) y que mantiene una buena frecuencia (20,5%).

También, aunque en menor medida, los pasajeros destacaron la existencia de dos puertas de salida y la mayor amplitud de los coches.

A la hora de enumerar las deficiencias del servicio el 41% dijo desconocerlas. Pero el 59% restante disparó contra la suciedad de los troleys, la poca frecuencia y los inconvenientes provocados por los cortes de luz.

Aún así, ocho de cada diez entrevistados aseguraron que les "gustaba" el trolebús como medio de transporte. Y más, el 90% se mostró de acuerdo con que se rehabiliten otras líneas.


Por la M
Los resultados de esta encuesta acompañarán la propuesta de La Comuna para que en la nueva licitación del sistema de transporte urbano, el municipio contemple el restablecimiento de la línea M. Este servicio dejó de funcionar en noviembre de 1984, reemplazado cinco años después por los colectivos de la línea 103.

"La línea K es un claro ejemplo de que el trolebús es un medio de transporte vigente e ideal, teniendo en cuenta que fue recuperado en 1994 tras una pésima gestión privada que lo llevó casi a la extinción", advirtió Comi.

Los pliegos para la licitación del nuevo sistema de transporte contemplan que los oferentes podrán operar el corredor norte-sur con trolebuses, lo cual tendrá un mejor puntaje en la calificación de la oferta y un plazo de concesión más prolongado.

Sin embargo, para el titular de La Comuna este beneficio no es suficiente. "La reactivación de las líneas de trolebuses requiere aportes millonarios lo que vuelve inviable el proyecto si no se le otorgan otros beneficios", explicó.

Así, propuso que se contemple una serie de incentivos adicionales como la eliminación de tasa de fiscalización y gravámenes municipales o la implementación de tarifas de electricidad diferenciales.

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