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 domingo, 06 de julio de 2003

Marcha de silencio para repudiar una agresión
Más de 500 personas de la comunidad de Máximo Paz se solidarizaron con un vecino que fue golpeado brutalmente

Silvia Carafa / La Capital

Máximo Paz. - La comunidad de esta localidad de 2.700 habitantes ubicada a 70 kilómetros de Rosario realizó anoche una marcha de silencio para expresar su solidaridad con Sergio (quien pidió reserva de su apellido), un vecino del lugar que sufrió un ataque que lo dejó inconsciente tras haber sido golpeado brutalmente por dos hombres que entraron a su casa, aparentemente sin intenciones de robo.

La agresión ocurrió el pasado 26 de junio cuando los desconocidos que llevaban gorros de lana hasta las orejas usaron una sevillana para amedrentarlo con sutiles marcas en el cuerpo. Luego de las amenazas lo patearon en reiteradas ocasiones hasta dejarlo desmayado.

Sergio es director técnico de fútbol y muy querido en el pueblo, por lo que se desconoce el origen y motivos del ataque, aunque algunos vecinos deslizaron que podría estar relacionado con un informe realizado por una comisión que él integra, en el que se daba detalles sobre el funcionamiento de un instituto del pueblo. En la búsqueda de los móviles, alguien recordó que hace unos meses y luego de la difusión del informe, Sergio y otra de las personas de la comisión comenzaron a recibir amenazas telefónicas.


Bronca en la plaza
En la marcha estaban representados todos los sectores de la comunidad de Máximo Paz. Ancianos, mujeres, jóvenes y chicos integrantes de equipos de fútbol se congregaron en la plaza en medio de un silencio casi sepulcral. Caminaron alrededor del espacio público y finalmente en una de las esquinas entonaron las estrofas del Himno Nacional.

Muy conmovidos por la convocatoria, los vecinos estallaron en aplausos porque es la primera vez que se autoconvocan en reclamo al esclarecimiento de un hecho de esta naturaleza. "No sabemos por qué hicieron esto, aunque ya sospechamos de quién puede estar detrás de la agresión, pero tenemos miedo de hablar", dijo uno de los concurrentes para agregar que "el pueblo ya se está poniendo fuerte. Queremos justicia y que esto no quede impune".

Por su parte el comisario del pueblo, Edgardo Rojas, señaló que "se está haciendo todo lo posible para esclarecer el insólito hecho, aunque aún no hay pistas. Este es un pueblo muy tranquilo donde rara vez ocurren hechos delictivos".

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