Año CXXXVII Nº 49654
La Ciudad
Política
Economía
El Mundo
Información Gral
La Región
Opinión
Escenario
Policiales
Educación
Cartas de lectores
Mundo digital



suplementos
Ovación


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 11/11
Mujer 11/11
Economía 11/11
Señales 11/11
Educación 10/11
Página Solidaria 17/10
Estilo 06/10

contacto

servicios
Institucional


 lunes, 12 de noviembre de 2007  
Zona de riesgo y descenso

Luis Castro / La Capital

Newell’s está inmerso en un territorio de alto riesgo. No gana, no suma, está antepenúltimo en la tabla y en zona de descenso directo. El panorama es desalentador y con un futuro cargado de incertidumbre. Con un plantel golpeado anímicamente y un DT que no le encuentra la vuelta para salir del acoso del promedio. Y la desesperación continúa, inquieta. La Lepra “tocó fondo”, como dijo Marcos Gutiérrez con total crudeza, pero alto realismo.

Olimpo era otro de los equipos a superar. Existía una obligación suprema, porque eran tres puntos ante un rival directo en la puja por escapar de la zona de los peores. Pero no, Matute Morales se encargó de darle un terrible golpe para hundir a la Lepra en los más profundo y dejarlo prácticamente imposibilitado de terminar el torneo fuera de los cuatro que quedarán en descenso directo o promoción.

   Pasando en limpio: Newell’s debería cosechar los nueve puntos que restan para superar a Colón, siempre y cuando el sabalero no sume en los tres que debe disputar. Caso contrario, el conjunto de Caruso Lombardi terminará el Apertura en descenso o promoción.

   Si el presente es complicado, en el horizonte el futuro aparece amenazante y desalentador. Porque ante el mínimo error después ya no habrá tiempo para corregirlo.



>>Culpas compartidas



   Está claro que la culpa de que esta actualidad sea nefasta no es de Caruso. La responsabilidad recae en los técnicos que pasaron y que transformaron a Newell’s en un equipo carente de protagonismo y con campañas mediocres. Y, sobre todo, en la dirigencia, que en las últimas temporadas equivocó el camino y contrató jugadores que poco aportaron. Es cierto que en este rubro acertó con la compra de Oscar Cardozo (vendido en una cifra histórica para el club), pero nada más. En este momento comenzaron a verse con mayor nitidez todos los errores que se cometieron. La pizza con champán (como la de la época menemista) tras la vuelta y gloria alcanzada en 2004 quedó atrás y ahora el presente está plagado de necesidades.



>>Sumar y sumar



   Ganar para sumar, esa es la única receta para comenzar a curar este mal de números. Los rojinegros están en una profunda crisis de la que no pueden salir. Sólo las victorias podrían alimentar las esperanzas de salir del pozo. La meta deberá ser quedarse con los puntos que restan de este Apertura, donde Ñuls se convirtió en uno de los peores, y pensar en el futuro. Ya sin margen para equivocarse.

   Si para zafar se necesitan cerca de cincuenta puntos en una temporada, a la Lepra no le quedará otra que pelear el Clausura. Si esto no es así, deberá lidiar en la promoción tratando de permanecer en primera. O lo que es peor, dará un paso gigante hacia atrás para recalar en la B Nacional. Algo impensado a esta altura, pero posible si no se reacciona a tiempo. l
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo


Ampliar FotoFotos
Ampliar Foto


Notas Relacionadas
Desafío

Salcedo y el difícil presente



  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados