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lunes,
12 de
noviembre de
2007 |
El desafío de su vida
José M. Petunchi
Horacio Usandizaga unificó el multitudinario apoyo de Central. Con su prepotencia verbal e impronta se ganó la confianza de los socios y, tal como se suponía, arrasó en las urnas. Un resultado que le otorga un apoyo extraordinario entre los canallas, y que a la vez constituye el desafío más importante de su vida, como el mismo dijo: ser presidente de Central, un club muy politizado y que está envuelto en la peor crisis deportiva e institucional de su historia.
Entre los aspectos que deberá sortear el Vasco en Central hay que separar lo importante de lo urgente. Entre las urgencias tendrá que devolverle credibilidad a un equipo devaluado y deprimido, que en cada fecha retrocede en el promedio, mientras el fantasma del descenso mete miedo. Deberá tener una política acertada en la llegada de refuerzos y también dar pasos seguros en la elección del DT.
En lo que respecta a lo importante, deberá sacar lo más rápido posible a Central de Tribunales, mientras hace frente a la enorme deuda posconcursal que dejó la última administración, la más nefasta en varias décadas; asumir en algo más de un año (diciembre de 2008) el pago de las cuotas de la convocatoria; los embargos y los juicios: y, tal como lo anunció en la campaña, erradicar a la barra del club. Pero, y casi paralelamente, deberá recuperar el prestigio y la credibilidad de Central como institución, la misma que Scarabino y cía. rifaron en los últimos años. Ganó Usandizaga. Pero por el bien canalla sería bueno que todos dejen de lado las miserias y sumen para sacar a Central del deterioro en que esta sumergido. l
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