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domingo,
07 de
octubre de
2007 |
Granos pioneros
La reducción de la conflictividad judicial es clave en negocios que manejan grandes volúmenes, enorme cantidad de contratos y que requieren de agilidad en la operatoria. De allí que el comercio de granos fue pionero en la conformación de una serie de reglas “no escritas” que regulan su funcionamiento, y también en la creación de instituciones para resolver conflictos.
En el año 2004, las bolsas de cereales de todo el país se tomaron el trabajo de poner por escrito las reglas que emanan del sistema de usos y costumbres que regula las transacciones comerciales desde hace más de 100 años. “Hemos puesto como reglas escritas, 100 años de comercio de granos en la Argentina”, dijo el presidente de la Cámara Arbitral de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, Alejandro Delgado, al presentar en ese momento el titánico trabajo que realizaron los técnicos de las principales cámaras arbitrales. El cuerpo normativo sistematiza todos los usos y costumbres en la actividad granaria y establece los derechos y obligaciones básicas de compradores y vendedores.
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