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domingo,
02 de
septiembre de
2007 |
Causa judicial y testimonios
Repsol-YPF documentó con escribano público la rotura del caño del poliducto e hizo la denuncia que ahora tiene en sus manos la jueza Ana María Bardone. También hizo constar su inquietud al Ministerio del Interior de la Nación.
La magistrada ya tomó varias declaraciones. Comparecieron la oficial de guardia de Bustinza, Margarita Farías; un secretario de AUE, el oficial de Bustinza Maximiliano Cortés, el funcionario de Repsol-YPF Osvaldo Laborda y un oficial de la sección Rastros de Cañada de Gómez.
Fuentes de la empresa, la mayor compañía extranjera en Argentina, señalaron a este diario que están dadas las condiciones para esclarecer el ilícito. Destacaron que hay un caño que se rompió y otras evidencias que dejan saber a las claras la actitud delictiva.
Técnicos de la compañía verificaron que el poliducto fue perforado en el kilómetro 1.430, a la altura de Bustinza, al detectar una baja en la presión del transporte de combustibles.
El robo verificado fue de 16.500 litros de nafta virgen. El camión utilizado para el robo era de un empresario cañadense, A.R.
Ni la Jefatura de Policía de Santa Fe ni el gobierno provincial hicieron referencias públicas sobre el grave caso más allá del anuncio de la voluntad de investigarlo.
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