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viernes,
24 de
agosto de
2007 |
Textiles reclaman más frenos a importación de productos chinos
A pesar de las restricciones puestas en marcha en los últimos días por el gobierno a las importaciones, el ingreso de productos textiles provenientes de China sigue siendo el principal temor de los empresarios locales, que consideran a la nación asiática como el “gran depredador” de las industrias nacionales.
La situación del sector textil y el peso de las importaciones provenientes de China acapararon las discusiones de los distintos paneles del encuentro organizado hoy en La Rural por la Fundación ProTejer, bajo el lema “Vamos por más, más empleo, más producción, más inversión, más innovación, más Argentina”.
El economista de la Fundación, Mariano Kestelboim, alertó sobre la amenaza que significa el continuo aumento de las importaciones textiles, que a fin de este año se proyectan por encima del récord de la convertibilidad, de 1.170 millones de dólares en 1998.
“Las importaciones de China crecieron en sólo cuatro años 934% y en el último semestre 145%, y se concentran en el sector de indumentaria”, dijo. Como contrapartida, añadió, “el crecimiento de las exportaciones de bienes industriales del sector textil fue de 30% en 2006 respecto del año 2002”.
El economista destacó además la necesidad de mantener un tipo de cambio competitivo y la sustitución de importaciones. Los panelistas coincidieron en que China es el “gran depredador” de las industrias nacionales.
El investigador francés Jean Ruffier aclaró al respecto que el gigante asiático “es la industria de la copia, pero a pedido” de las grandes cadenas que logran importantes márgenes de ganancias al fabricar allí sus productos. “En China se puede producir a costos sensiblemente menores porque la escasez de empleo da la posibilidad a campesinos de insertarse en talleres informales, donde desempeñan tareasa cambio de casa, comida y capacitación”, explicó.
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