Piden liberar a una joven imputada por un homicidio

La Corte Suprema de Justicia de la provincia deberá resolver si deja o no en libertad a Flavia Lussenhoff, la joven procesada por el asesinato de su tía Alba Digiuni, ocurrido en diciembre pasado en Venado Tuerto. El abogado de la profesora de gimnasia presentó un hábeas corpus ante el máximo tribunal santafesino al no haber otros jueces que en lo inmediato se ocupen del caso.

   La joven está detenida y procesada por su presunta participación en el homicidio. Pero su abogado apeló ante la Cámara Penal y, al emitir su dictamen, la fiscal Graciela Mastrocésare entendió que “no se ha demostrado siquiera indiciariamente” su participación en el homicidio y evaluó que debe ser indagada por otro delito, el de encubrimiento agravado.

   Como esa figura contempla la excarcelación, el letrado Juan Ignacio Prola solicitó la libertad de Lussenhoff. Pero el trámite de la causa está suspendido porque la Cámara de Apelaciones venadense fue recusada, por lo que acudió a la Corte por tratarse de un planteo urgente.

   Flavia Lussenhoff y su ex esposo Juan Cruz Münger fueron procesados en mayo por el crimen de Alba Digiuni, la esposa del juez civil y comercial venadense Alberto Frinchaboy. La medida la adoptó el juez de Instrucción Hugo Perassi, quien entendió que Flavia es presunta coautora material del homicidio.

   Digiuni fue asesinada de siete puñaladas mientras cuidaba al hijo de Flavia y Juan Cruz en la casa de su sobrina, quien en ese momento daba clases en su gimnasio ubicado en el frente la misma vivienda. Recibió cinco puntazos en el cuello, dos en los ojos y un golpe en la cabeza.



Comprometido. Münger, experto en artes marciales, fue detenido porque tenía una mala relación con Digiuni, quien le reprochaba sus problemas de adicción. Lo procesaron porque algunos vecinos lo vieron cerca del lugar del crimen y se encontró ropa ensangrentada en su casa. A Lussenhoff la involucraron por su presencia en el lugar.

   En su escrito ante el máximo tribunal santafesino, Prola planteó que a partir del dictamen de la fiscal su defendida estaría en condiciones de recuperar la libertad. Pero, según sostuvo, la Cámara Penal venadense se niega a decidir sobre la excarcelación por haber sido recusada por la defensa de Münger. Luego intervino en el caso la Cámara Civil, que también se excusó. Finalmente se decidió conformar el tribunal de apelación con abogados designados como conjueces.

   Mientras tanto, Lussenhoff “no puede recuperar la libertad porque se suspendió el trámite y no hay tribunal habilitado y dispuesto a resolver en tiempo”, planteó el defensor, quien entiende que no se puede detener a una persona más allá de la pretensión del órgano acusador.

   “Por la escala penal que contempla el delito de encubrimiento y la ausencia de antecedentes penales mi defendida está en condiciones de recuperar la libertad y no puede hacerlo en virtud de problemas procesales y de recusaciones de jueces que atentan contra su legítimo derecho constitucional de libertad”, indicó.