Con ayuda policial pudo retirar el cadáver de su madre

Una jubilada que falleció el pasado viernes estuvo tres días en la casa de su hijo y éste debió recurrir a la policía ya que, según denunció, la médica que lo atendió le indicó que quien debía firmarle el certificado de defunción era el médico de cabecera del Pami, a quien no pudo encontrar en todo el fin de semana.

El hecho ocurrió el pasado viernes cuando Eugenio José S., de 41 años, llamó a una empresa de emergencias privadas ya que su madre había sufrido una descompostura. La profesional constató el fallecimiento de la mujer Dora Paoletti, de 82 años, pero le indicó al hijo que quien debía firmar el acta de defunción era el médico de cabecera de Pami.

De manera infructuosa el hombre intentó comunicarse con el médico y durante todo el fin de semana permaneció con el cadáver de su madre en el dormitorio de la casa de calle Viamonte.

Ya desesperado, el lunes – y luego de señala que no había obtenido respuestas de parte de las autoridades del Pami- concurrió a la seccional 5ª a solicitar la presencia de un médico forense para que el cuerpo de su madre pudiera ser retirado.