|
martes,
07 de
agosto de
2007 |
Un arancel más barato, con quejas de los talleres
La ciudad de Córdoba, que tiene prácticamente la misma cantidad de habitantes que Rosario, posee un parque automotor estimado en 300 mil vehículos. Según fuentes de ese municipio y de las empresas que hacen los controles, se revisan unos 130 mil coches por año, con un arancel para vehículos particulares 50 por ciento más barato que el que se aplicará en Santa Fe.
Los aranceles que rigen en la capital cordobesa son los siguientes: autos particulares, 28,70 pesos; vehículos utilitarios o de carga, 41, y taxis 35,90 pesos. Si algún vehículo no sorteara el control porque se le detectó una falla, su propietario tiene 60 días corridos para solucionar el problema y luego tiene que volver a presentarse a la revisión.
Sin embargo, Sergio Piolamonti, encargado de una de las plantas donde se hacen las revisiones, expresó que esos valores no representan los costos reales. “En Europa y Estados Unidos, ese tipo de revisiones cuestan entre 20 y 25 dólares o euros. En Córdoba estamos quebrados y con un atraso del 200 por ciento”.
Fallas. Las fallas más graves detectadas tienen que ver con desperfectos en luces (23%), frenos (22%) y suspensión (11%). Esos problemas impiden la aprobación de la inspección y deben ser arreglados y el vehículo reverificado.
La Inspección Técnica de Vehículos (ITV) rige en Córdoba desde 1995, pero se aplica sólo en la capital. Según Piolamonti, el gobierno provincial adhirió a la ley nacional de tránsito, pero aún no la promulgó. En la Docta funcionan tres plantas con tres líneas de supervisión cada una: dos para vehículos livianos y una para pesados.
Según fuentes de la Dirección de Tránsito municipal de Córdoba, durante 2006 pasaron por la revisión unos 130 mil vehículos. Todos los rodados que figuran radicados en la ciudad deben pasar anualmente por la revisión técnica. Los únicos que se benefician con una excepción son las motos y los autos particulares 0 kilómetro, que tienen dos años de gracia.
“En el caso de autos destinados a servicio público, como por ejemplo los taxis o remises, deben acudir a la inspección cada seis meses cuando tienen menos de tres años de uso. Cuando el lapso es mayor los controles se deben hacer cada cuatro meses”, señalaron las fuentes consultadas.
enviar nota por e-mail
|
|
|