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miércoles,
01 de
agosto de
2007 |
Acuerdos no llegan a Rosario
Organizaciones de defensa de los derechos del consumidor, agrupaciones de supermercadistas, almaceneros, carniceros y también productores frutihortícolas de Rosario solicitaron una entrevista con el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno. La iniciativa, confirmada por la presidenta de la Oficina Municipal de Defensa del Consumidor, Analía Carrió, busca resolver un interrogante común: “¿El límite de los acuerdos de precios se termina en la General Paz?”.
Carrió aseguró que el interior y Rosario están completamente afuera de los acuerdos de precios que instaló el Estado. “Sólo los supermercados grandes reciben informaciones de aquellos aumentos que los proveedores tienen autorizados”, se quejó la titular del ente municipal.
Dentro de los productos más afectados por los constantes aumentos se ubican los lácteos y sus derivados, los fideos, los jugos y las gaseosas. Además, a los pequeños comerciantes les cuesta adquirir productos de segundas marcas para ofrecer a su clientela.
Diferencias. Cristian Galindo, titular de la Red Argentina de Consumidores, remarcó que existen diferencias geográficas y por tipo de boca de expendio en la ciudad. Esto tiene que ver “con los márgenes de negociación y con los intereses de cada comerciante”.
La Capital recorrió comercios barriales y grandes supermercados. A modo de ejemplo, un sachet de leche en una granja cuesta 1,90 y en un super 1,65. Con los quesos, la teoría se invierte: el de segunda marca cuesta 15 pesos en una granja mientras que en un súper, 19,70.
Galletitas, sean dulces o saladas, y gaseosas, no tienen grandes variaciones de precios entre un tipo de comercio y otro. Pero sí hay fuertes disparidades en productos como la harina (1, 40 en granja y 1,75 en los súper) y el pan (3 pesos en granjas y 3,70 súper).
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