Huyen tres presos de la 10ª y los atrapan

La desesperación por frustrar una fuga del penal de la comisaría 10ª llevó al jefe de esa dependencia a usar su propio auto para perseguir a los prófugos. Fue ayer a la mañana en la comisaría de Alberdi y los tres evadidos fueron recapturados a poco de escapar.

   Según contó el jefe de la 10ª, Alejandro Sauro, cerca de las 9 de ayer, cuando realizaba la requisa advirtió que se habían esfumado tres reclusos tras cortar los barrotes de una celda. En el momento, el propio Sauro indicó que al levantar la vista distinguió que “dos de los presos habían escalado los techos de las casas vecinas mientras un tercer detenido corría por el patio de la seccional para ganar la calle”. Este último recluso no llegó muy lejos. Sauro, según contó, lo atrapó “de un manotazo”.

   Ya para entonces, los otros dos presos corrían por la calle. Desde la misma seccional 10ª dieron aviso al Comando Radioeléctrico y salieron tras los evadidos. Los hombres de la 10ª y los del Comando se encontraron en la intersección de Warnes y Chiclana (la esquina de la comisaría).

   Sauro señaló que se subió a su auto junto a otros agentes de la comisaría y fueron tras los pasos de los fugitivos. Los presos escaparon hacia calle Darragueira, por Chiclana, buscando escabullirse por las vías del ferrocarril. Sin embargo, cuando llegaron al cruce a nivel, el paso de un tren de carga de la empresa Nuevo Central Argentino los obligó a retroceder justo en el momento que aparecieron dos unidades del Comando para acorralarlos.



Cercados. La alocada carrera de los prófugos terminó en el pasillo de una casa en construcción de Warnes al 1200 — a una cuadra de la 10ª—, donde finalmente fueron atrapados, no sin antes presentar una pequeña resistencia, cuando ya los uniformados habían rodeado la cuadra.

   “Por suerte los agarramos”, comentó el comisario Sauro ayer a la tarde cuando del otro lado de la línea telefónica resonaba el sonido de los martillos de los operarios que reparaban los barrotes de los calabozos.

   Los frustrados fugitivos fueron identificados como Héctor Hugo Castellano y Guillermo Kelly. Ambos están acusados de robo calificado agravado. Castellano fue procesado por un juez de Instrucción, mientras Kelly espera que un juez de Sentencia se pronuncie sobre su caso. l