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domingo,
03 de
junio de
2007 |
Test capital. Frenética avanzada de la Rosada para que su postulante pase a la segunda vuelta
Los porteños van hoy a las urnas en otra elección testigo para el país
Macri aparece como el ganador, pero los sondeos indican que deberá ir a un ballottage
Walter Palena / La Capital
Más que nunca, los ojos del país estarán puestos hoy en la elección para jefe de Gobierno porteño, una compulsa que tiene tres protagonistas principales y varios actores de reparto. Mauricio Macri aparece, por lejos, como el preferido para ganar los comicios, aunque ninguna encuesta le otorga la cifra necesaria para sortear un ballottage.
Una segunda vuelta encontrará al titular del PRO compitiendo con Jorge Telerman (actual jefe comunal) o con Daniel Filmus, el ministro de Educación nacional que, gracias al apoyo que recibió del presidente Néstor Kirchner, no sólo salió del anonimato sino que podría tener chances de ir a una segunda vuelta con Macri.
Hasta hace dos semanas Telerman aventajaba claramente a Filmus por el segundo lugar. Pero el Pelado cometió varios errores en el tramo final de la campaña. Esto, sumado al juego sucio de los soldados kirchneristas (Miguel Bonasso es el mejor ejemplo), acercó a un lugar expectante al ministro de Educación.
La fuerte apuesta de Kirchner para su delfín capitalino demuestra que las elecciones porteñas significan mucho para el laboratorio electoral de la Casa Rosada, que dirigió toda la artillería pesada contra Telerman. Si Filmus llegara al ballottage, el que pasaría a ser blanco directo de la pingüinera sería en este caso Macri, quien balconeó y hasta se benefició con el fuego cruzado entre Telerman y el gobierno nacional.
Macri sabe que si su contrincante en la segunda vuelta es Filmus, los kirchneristas apelarán nuevamente a los archivos, sacarán del arcón fotos comprometedoras y le pegarán en la frente el rótulo de "noventista menemista", "derechista" y toda esa adjetivación negativa que tanto gusta utilizar a los progres porteños y a la mayoría de los habitantes de esa capital de periferia llamada pomposamente Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Pero, guste o no, toda elección en Capital Federal luego marca tendencias nacionales, aunque algunas experiencias ganadoras hayan resultado después frustrantes, como sucedió con el Frepaso o con el propio Fernando de la Rúa, triunfador consuetudinario en las tenidas porteñas. Hoy, al igual que ayer con Menem, nadie parece haberlo votado.
Alianzas
Cada uno de los candidatos tejió en su momento sus respectivas alianzas para seducir a un electorado complejo La más sólida parece ser Propuesta Republicana PRO armada hace tiempo por Macri y Ricardo López Murphy a la que se sumaron otros sectores liberales Lleva como compañera de fórmula a Gabriela Michetti actual legisladora porteña y cultora del bajo perfil
Telerman, después de coquetear con sectores peronistas afines al gobierno, se sumó a la Coalición Cívica, que lidera Elisa Carrió, e incorporó a su fórmula a Enrique Olivera, ex jefe de Gobierno porteño cuando completó el mandato de De la Rúa. También cuenta con el apoyo del Partido Socialista y otras agrupaciones satélites.
Filmus, el candidato K, lleva como acompañante a Carlos Heller, dirigente cooperativista de histórica cercanía con el Partido Comunista y viejo rival de Macri en la interna de Boca. Esta lista también es respaldada por el ex jefe comunal Aníbal Ibarra, quien ahora se postula para legislador porteño.
Bien atrás se ubican la centroizquierda, con el economista Claudio Lozano a la cabeza, y una constelación de partidos de izquierda, cuya máxima referencia es Patricia Walsh.
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