Del obelisco a la bota

Por Mauricio Maronna
La campaña electoral en la ciudad de Buenos Aires impacta directamente en la provincia de Santa Fe. Néstor Kirchner se puso al hombro la candidatura de Daniel Filmus, un político opaco, sin grandes luces y que hasta hace 25 días naufragaba sin ninguna chance de ingresar al ballottage. ¿Por qué el presidente no repetiría la misma estrategia en la bota, territorio que, a diferencia de Capital Federal, desde 1983 siempre ha sido peronista?

Con todas las de perder (mientras las calles, los medios, los análisis políticos y las encuestas daban como seguro que Mauricio Macri y Jorge Telerman disputarían la gran final), el santacruceño se trepó a escenarios, vituperó al actual jefe de Gobierno, doblegó a los grandes medios de comunicación y se jugó sin circunloquios por su ministro de Educación. De buenas a primera, el barbado funcionario quedó (según todos los sondeos) a las puertas del ballottage, cuestión que, de producirse, le impedirá a Kirchner padecer de un domingo negro .

El Movimiento Popular Neuquino (MPN) también se impondría cómodamente hoy, pese a la crisis que envolvió a la provincia sureña tras el asesinato del docente Carlos Fuentealba. "Si vos querés ser nuestro candidato tenés que dejarnos poner el 60% de los legisladores de la ciudad y el 50% de los funcionarios. Y debe quedar en claro que el triunfo es tuyo pero también de Kirchner", le dijo un altísimo funcionario de Balcarce 50 a Jorge Telerman cuando el afrancesado jefe de Gobierno aún coqueteaba con Julio De Vido, Carlos Zannini y otros ministros y secretarios de Estado.


El nuevo golden boy
Del otro lado de la raya Alberto Fernández no quería imposiciones únicamente lo movía la relación de odio con Telerman arrastrando al presidente a una batalla que parecía perdida antes de disparar un solo tiro Telerman se negó a ser un futuro Sergio Acevedo ex gobernador de Santa Cruz y la pelea sin cuartel favoreció a Mauricio Macri el nuevo golden boy de la política argentina que creció con la única obligación de saltar baches para la foto mostrar cotillón para las cámaras de TV y pedir primeros planos para sus ojos celestes

Un dato parece habérseles escapado a todos: la magnífica candidata a vicejefa de Gobierno Gabriela Michetti, quien mostró siempre un don de gentes y una dulzura poco frecuente para la política de cuero duro que envuelve a los dirigentes.

Este diario fue el primero en revelar un acuerdo secreto entre el kirchnerismo de primera línea (llámese Alberto Fernández) y Macri. De pronto, las revistas oficialistas seudoprogres que vinculaban al hijo de Franco con el menemismo, los negocios sucios al amparo del Estado, la frivolidad y la vida de sibarita se olvidaron de hacer foco en el presidente de Boca y comenzaron a tener como blanco a Telerman, mucho más luego de que éste consolidara la alianza con Elisa Carrió, la enemiga número uno de la pingüinera. Un ejemplo de prensa canalla es el que ofrece un semanario político que, en su último número, pone en tapa a Filmus (riguroso primer plano) y a Telerman bajo el engañoso título: "Uno de dos". ¿Y Macri?

"Macri no sabe lo que le espera para la segunda vuelta si es que Filmus resulta su competidor. Le van a tirar con misiles. La campaña será más sucia que nunca. Si les das margaritas a los chanchos...", previene un legislador santafesino, conocedor de los métodos non sanctos del laboratorio de Olivos.

Telerman cometió errores de principiante en las últimas semanas. "Jorge, se te fue la mano con la publicidad. Abusaste de la cartelería y te olvidaste de la televisión. La gente sabe más de TV que de política. Tu pelada aparece hasta en el baño de damas de los restaurantes", le dijo en un evento la esposa de un prestigioso consultor político. "Tenés razón, me equivoqué", fue la desangelada respuesta del hombre que bailó, cantó, ensayó posturas zen y se prestó a las frivolidades de un programa seudohumorístico que en verdad es una célula del kirchnerismo y el macrismo (depende del tiempo electoral) que se disfraza de una independencia periodística que no es tal.


Hipocresías
La misteriosa Buenos Aires le otorga una acción de oro al término progresista como si fuera un pasaporte al Paraíso Ahí se lo ve y escucha a Filmus presentarse como la receta para combatir las prácticas noventistas que tanto mal le hicieron al país

Filmus no resiste un archivo: fue secretario de Educación de Carlos Grosso, quien terminó preso por corrupción. Mientras ocupaba su función, Aníbal Ibarra (hoy aliado del ministro) denunció a la gestión grossista por la construcción de la ya mítica "escuela shopping". Pero la currícula de Filmus tiene otro antecedente poco progre. Cuando se alejó de Grosso siguió viviendo del Estado, esta vez como asesor de la ministra menemista Susana Decibe, impulsora de la ley federal de educación, resistida por muchos gobernadores. Hoy Filmus, alias Psicobolche, levanta el dedo acusador contra el "noventismo menemista". Saque el lector sus conclusiones.

De Telerman ya se escribió en esta columna que fue embajador de Menem en La Habana, diplomático en Estados Unidos, asesor de Eduardo Duhalde y vocero de Antonio Cafiero.

Pese a la demonización, lo único nuevo en la política porteña es Macri.

Un triunfo en la capital del país será bien recibido por quienes ya se han hartado del monocromo que envuelve cada elección. Para ellos, estaría bueno. En Catamarca ganó un radical, pero resultó que el presidente (y los propios correligionarios cooptados por la billetera) le añadió la letra K; en Río Negro sucedió lo propio, desairando la Casa de Gobierno al ultraoficialista Miguel Pichetto, quien quedó rumiando su bronca en la soledad de la derrota.

El miedo a Kirchner es de tal magnitud que la inmensa mayoría de los senadores nacionales justicialistas reniegan (en la intimidad) de la posibilidad de que Julio Cobos acompañe la fórmula presidencial. "El candidato tiene que ser el Lole, hasta cuándo nos vamos a bancar esto", rezongó en voz alta un legislador por provincia de Buenos Aires.

"Esto es tema terminado. Si quieren que sea Cobos, será Cobos. Que no usen mi nombre porque después dicen que me bajaron por noventista o cosas por el estilo", corta en seco Carlos Reutemann. El justicialismo santafesino, con los reflejos dormidos, recién tomó nota el domingo pasado de la cuestión, lo que mereció un artículo (el viernes) del diario Ambito Financiero y le agregó una supuesta reunión de legisladores nacionales peronistas, encabezados por Agustín Rossi, convocada para aunar voluntades en pos de que el Lole sea el compañero de fórmula de Néstor Kirchner o Cristina. "Son operaciones de prensa", le dijo el senador a un interlocutor.


El juego de K
Todos los sondeos de cara a los comicios del 2 de septiembre dan ganador a Hermes Binner pero por una diferencia mucho menor a la que Macri le saca a Filmus en Capital ¿ El Frente para la Victoria seguirá dormido o se atreverá a pedirle al presidente que se involucre en la campaña como lo hizo con el hasta hace poco devaluado candidato a jefe de Gobierno oficialista Los socialistas siguen enviando encuestas a Balcarce 50 según las cuales el 70% del voto a Binner en Rosario iría para el presidente o su esposa una forma de desactivar el ingreso de Kirchner a la provincia Si el jefe del Estado que tiene una intención de voto cercana al 60% en la bota no le levanta la mano a Rossi o a Rafael Bielsa luego de las internas no habrá margen para las dobles lecturas

La campaña electoral en los cien barrios porteños puso blanco sobre negro. Con Filmus (ingrese o no al ballottage), Kirchner remontó un globo aerostático cargado de cemento. ¿El candidato que resulte electo para pelear por la Casa Gris, el gobernador Jorge Obeid o el Partido Justicialista santafesino se animarán a ponerle el cascabel al pingüino o seguirán resignándose mansamente a que un triunfo de Binner sea tomado por el Ejecutivo nacional como funcional al "proyecto" que encabeza Kirchner, coloreado por el redundante título de Concertación Plural?

La respuesta a este interrogante será más útil que cien encuestas.

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Kirchner, Filmus y Binner.