Ahora admiten que revisarán el pase de grado por decreto

El caso de un chico rosarino cuyos padres se niegan a que empiece 2º grado reavivó la polémica

La nueva figura de la promoción asistida, que sostiene que ningún niño debe repetir el primer grado (primer año de EGB), enfrenta otra crisis. Al caso de Javier, el niño de 7 años de Granadero Baigorria cuyos padres se niegan a que pase de grado "por decreto", se le sumó el de otro chico de Rosario que, según su familia, no estaría en condiciones de pasar a segundo grado. La situación cambió la actitud en el Ministerio de Educación provincial, donde admitieron que estudiarán la posibilidad de hacer excepciones en algunos casos.

La polémica se desató nuevamente ayer cuando Sandra, la mamá de Tomás Smith, de 7 años, declaró a los medios que su hijo "no puede pasar a segundo grado".

A sus aseveraciones se sumaron los certificados de los profesionales. El informe firmado por la psicóloga asegura que el niño "es inmaduro para su edad y necesita sus tiempos para aprender".

También la fonoaudióloga aseguró que el chico tiene problemas, además de un cuadro de dislaxia (dificultad para la lectura). Y la maestra de primer grado había confirmado el año pasado que el niño no podía pasar a segundo.

Sandra explicó que su hijo no sabe leer. "Escribe su nombre de memoria pero no reconoce las letras", admitió y aseguró que "está en la misma situación que cuando comenzó el año".

Según la madre, en la Escuela Nº 107 9 de Julio -a la que asiste Tomás- habría otros dos chicos en la misma situación, pero la directora, Carla Borgonovo, la desmintió.

La historia de Tomás comenzó el año pasado, cuando la maestra notificó a la mamá que su hijo no había alcanzado los objetivos del grado y debía repetir. Así las cosas, al comenzar el ciclo lectivo el chico asistió a las clases de primer grado.


Desorientada
Sin embargo el jueves pasado llamaron desde la escuela a la casa de Tomás para avisar que debía pasar a segundo grado Desorientada la madre se presentó en la institución y solicitó que no se realizara el cambio con los consiguientes certificados expedidos por profesionales que avalaban su pedido

A pesar de esto, las autoridades argumentaron que debían ceñirse a las leyes vigentes. En este caso, al decreto de resolución Nº1.637 que establece la "promoción directa de los alumnos de primer año de EGB con los acompañamientos necesarios para garantizar el proceso de alfabetización ya iniciado" (ver aparte).

La mamá se dirigió a la sede local del Ministerio de Educación, pero no la atendieron. Entonces pensó que el único camino que le quedaba era acudir a los medios y hacer pública su situación. A partir de ese momento la historia cambió.

Si bien desde la escuela intentaron acallar a la madre, no lograron su objetivo, en cambio Sandra consiguió que la cartera educativa se hiciera cargo de su caso.

Así, el delegado de la Región VI, Humberto Cancela, admitió que "se va a privilegiar al niño". El funcionario le dijo a La Capital que "si hay que hacer alguna excepción, se hará en función del alumno".

El Ministerio de Educación estaría dispuesto a estudiar los casos "difíciles" y permitir la repitencia en aquellos en que, luego de estudios pedagógicos, se vean convenientes. Por primera vez las autoridades educativas revisarían el decreto. Para ello solicitaron a la escuela que preparen un informe sobre la situación de Tomás, que será estudiado en el ministerio. Recién entonces tomarán una decisión. En tanto, el chico seguirá cursando primer grado.