|
jueves,
10 de
mayo de
2007 |
Una fiesta pese a la lluvia y el frío
San Pablo. - El Papa fue recibido ayer en Brasil por miles de fieles que enfrentaron rezando y cantando una persistente lluvia y una de las tardes más frías del año para recibir la bendición del Pontífice frente al Monasterio de Sao Bento.
Las calles y avenidas del trayecto que Benedicto XVI realizó a bordo de su "papamóvil" se colmaron de alrededor de 5.000 devotos que saludaron el paso del líder máximo de la Iglesia Católica con pancartas de bienvenida, banderas y pañuelos blancos.
En medio de la multitud de fieles católicos podían verse banderas de varios países sudamericanos, como Argentina, Bolivia, Chile y Uruguay.
En medio del repicar de las campanas y el clamor del público, Benedicto XVI salió al balcón del monasterio desde donde saludó a los fieles en portugués, y confesándose conmovido por la "calurosa acogida", reconoció que "es una iglesia de fiesta".
Protesta gay
Por otra parte un centenar de manifestantes gay quemaron en la ciudad de San Salvador una foto del Papa quien ha dicho que el homosexualismo es intrínsecamente malo y que los casamientos gays son inmorales y nocivos
La manifestación fue convocada por el Grupo Gay de Bahía (GGB), cuyos miembros portaban pancartas en las que se leía "Papa Benedicto XVI, basta de inquisición", y "el amor no tiene sexo".
enviar nota por e-mail
|
|
|