Caso Skanska: la Justicia ordenó siete detenciones

Se trata de ex ejecutivos de la empresa sueca que habrían sobornado a funcionarios. El juez federal López Biscayart les imputó cargos de asociación ilícita para la evasión impositiva

Siete ex ejecutivos de la multinacional de origen sueca Skanska fueron detenidos ayer por orden del juez en lo penal tributario Javier López Biscayart, quien en las próximas horas indagará a los acusados bajo cargos de asociación ilícita para la evasión impositiva.

Personal de la División Jurídico Contable de la Policía Federal apresó a siete ex directivos de Skanska, que anoche fueron trasladados a la alcaidía de los Tribunales.

De acuerdo con la información suministrada por fuentes judiciales, entre los detenidos se encuentran los ex directivos Eduardo Varni, Alejandro Gerlero, Gustavo Vago y un ejecutivo de apellido Sareba. En tanto, no era clara la situación de Alfredo Grecco, beneficiado con una exención de prisión hace aproximadamente un año.

Entre los detenidos también habría gerentes de segunda línea de la multinacional sueca.

López Biscayart, quien el lunes pasado se reintegró al juzgado a su cargo tras una licencia de 10 días por vacaciones, decretó el secreto de sumario para preservar la información sobre una serie de allanamientos realizados en las últimas horas.

Abogados vinculados con la defensa de los imputados dijeron que “López Biscayart se anticipó a la otra causa”, que, por posibles maniobras de corrupción que involucran a Skanska, tramita el juez federal Guillermo Montenegro.

Los defensores adjudicaron a López Biscayart una “irrupción mediática” sustentada en los operativos de arresto.

Fuentes de Skanska afirmaron que los detenidos “ya no están” en la empresa porque fueron despedidos el año pasado como consecuencia de “una auditoría interna dispuesta por la compañía para revisar todo lo actuado en relación al proyecto de ampliación del Gasoducto Norte”, operado por TGN.

“Ninguno de los arrestados es una alta autoridad de Skanska actualmente, y algunos fueron gerentes del proyecto”, explicó un vocero de la firma.

El pasado jueves la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Penal Económico desdobló la causa por los sobornos que Skanska admitió haber pagado para obtener contratos de obra pública, pero la medida no está firme y sería apelada ante la Cámara Nacional de Casación Penal.

Es que algunos imputados pedirán a la sala IV de Casación que despoje del expediente completo al juez López Biscayart para que sea su colega Guillermo Montenegro, del Tribunal Federal Nº7, quien unifique el caso en un solo sumario.

Por la unificación.
Sin embargo, uno de los acusados litigará por la unificación de la causa en el juzgado a cargo de López Biscayart, quien tiene la mayor parte de la prueba reunida en el caso porque inició su investigación hace más de un año. El magistrado, según algunas versiones, se resistiría a girar la evidencia a Montenegro pese a la decisión de la Cámara de Apelaciones. Fuentes allegadas a Montenegro afirmaron que “no existe ninguna diferencia” entre ambos magistrados.

Skanska es una empresa multinacional de capital sueco que en el 2005 se adjudicó un contrato para la ampliación de un gasoducto y, en sus oficinas, López Biscayart secuestró más de 100 comprobantes presuntamente falsos de una veintena de empresas distintas.

El detenido apoderado de la sociedad aparentemente fantasma Infiniti, Adrián López, declaró que los comprobantes ocultaban una facturación ficticia que habría encubierto el pago de supuestos sobornos a funcionarios, entre ellos del Ministerio de Planificación, a cargo de Julio De Vido.

El magistrado López Biscayart ordenó la detención de los ex directivos de Skanska.