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miércoles,
09 de
mayo de
2007 |
Cara y ceca. Trabajan contrarreloj para habilitar el Hospital de Emergencias.
El nuevo Heca entró en la cuenta regresiva y ya está siendo equipado
El nuevo Hospital de Emergencias Clemente Alvarez dejará de ser ese brillante monumento al vidrio que hasta ahora sólo relucía en Pellegrini al 3200, despertando alguna suspicacia sobre su efectiva puesta en marcha. Hoy por hoy, el futuro hospital ya está recibiendo su equipamiento de última generación mientras se ajustan los detalles para darle final de obra el próximo 30 de mayo, aunque habrá que esperar de 60 a 90 días para que reciba a sus primeros pacientes.
Se trata de una construcción impactante de 22 mil metros cuadrados, con cuatro niveles de complejidad, altísimos estándares de confort y un diseño acompasado a las necesidades médicas. "Tener este hospital será un orgullo y un avance enorme para la salud municipal", afirmó el director del centro, Néstor Marchetti, quien ofició de guía en un recorrido con la prensa por los flamantes interiores del nuevo Heca.
El momento elegido por el municipio para la visita quizás no fue casual. Máxime si se considera la necesidad de mostrar que, pese a que el cambio de secretario del área sigue sin poder frenar los paros (ver página 4), no sólo hay pálidas en Salud municipal, sino también entusiasmo.
Hacia adentro
En el interior del Heca la expectativa crece al mismo ritmo con que se ajustan los últimos detalles en el nuevo centro asistencial una obra largamente reclamada y que sufrió sucesivas postergaciones durante los picos de la crisis económica nacional
Comenzada en enero de 1999, con un plazo inicial de ejecución de tres años, el proyecto sufrió su parate más severo durante el 2002, cuando llevaba solamente el 40 por ciento construido. Un año y medio después, un crédito por 23,5 millones de pesos del Banco Interamericano de Desarrollo le permitió seguir adelante. En total, el emprendimiento demandó casi 30 millones de pesos en infraestructura y otros 26 en equipamiento.
Pero basta recorrer el hospital con ojos de paciente para sentir que eso no puede pensarse como gasto, sino como una verdadera inversión.
Estructurado sobre dos pisos y en tres bloques (cada uno con sus perspectivas plantas bajas y altas), el nuevo Heca contempla tres niveles de complejidad y un área específica de emergencia.
"Este hospital está diseñado para atender en función de la gravedad de la patología del enfermo por grado de cuidados progresivos: tres niveles de complejidad -cuidados críticos, que incluye unidad coronaria, terapia y quemados; cuidados intermedios altos y cuidados intermedios bajos- más el área de emergencia primaria, que recepciona toda la patología de urgencia", explicó ayer Marchetti.
Dos ejes
Una de las arquitectas a cargo de la obra bajo la dirección de Mario Corea Silvana Codina describió que todo el edificio está pensado sobre el cruce de dos ejes conceptuales y funcionales
Uno va, gradualmente, de los espacios más públicos y de mayor circulación (a lo largo de Pellegrini) hacia los más reservados (que llegan hasta casi el pasaje Boero, después de Cochabamba, convertida a su vez en calle interna y cerrada). El otro eje parte del sector más organizado y programado, donde están los consultorios (del lado de Vera Mujica), hacia lo menos programado, que es la emergencia (sobre Crespo).
Otro principio rector de la obra está dado por una gran iluminación natural, que no sólo otorga un plus estético. Según Marchetti, así "desaparece la vieja concepción del hospital os-
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Fotos
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Equipamiento de ultima tecnología ya está llegando e instalándose en el flamante edificio vidriado de Pellegrini al 3200.
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