Sarkozy prepara el terreno para su ambicioso programa de reformas

El presidente electo se retiró unos días a la isla de Malta, donde evaluará su futuro gabinete. Su partido debe ganar los comicios legislativos de junio para implementar medidas clave

París.- El presidente electo francés, Nicolas Sarkozy, se retiró ayer junto a su familia a la isla mediterránea de Malta, con vistas a dedicarse a considerar la formación de su futuro gabinete y también para preparar su estrategia en las elecciones parlamentarias de junio, cruciales para poder llevar adelante las profundas reformas prometidas. El combativo conservador anticipó una avalancha de medidas en sus 100 primeros días, tras una elección que mostró el descontento con el estancamiento que marcaron los 12 años de presidencia de Jacques Chirac.

Sarkozy obtuvo un contundente respaldo para dirigir sus reformas políticas y económicas, al sumar el 53,06% de los votos en la segunda vuelta del domingo, contra el 46,94% de la socialista Segolene Royal. Pero el nuevo presidente también necesita obtener la mayoría en las elecciones para la Asamblea Nacional, que tendrán lugar el 10 y el 17 de junio, para poder aplicar sus promesas de flexibilizar la legislación laboral, recortar los servicios públicos, reducir los impuestos y restaurar el empleo pleno.

Según una encuesta publicada el domingo, el partido de Sarkozy, el oficialista UMP, está por delante de los socialistas en las parlamentarias, con un 34% frente a un 29%, lo que los pone en una fuerte posición para ganar la elección en junio, algo que no ocurre en más de 25 años.


Pasos acelerados
Todo indica que Speedy Sarko planea un inicio relámpago como presidente El 16 de mayo cuando Chirac le traspase las llaves del Palacio del Elíseo y con ellas el código secreto del arsenal atómico Sarkozy presentará su gabinete Unos días más tarde viajará a Berlín y Bruselas para poner en marcha su minitratado sobre las instituciones de la Unión Europea su propuesta tras el fracaso de la Constitución del bloque

Entre el 6 y el 8 de junio, durante la cumbre del G8 en Heiligendamm, tendrá lugar su primer encuentro con los "grandes" del mundo. Dos días después empezarán las elecciones parlamentarias, y tan pronto como sean elegidos los nuevos diputados, Sarkozy convocará una sesión extraordinaria antes de las vacaciones de verano (boreal) para reformar la Ley de Inmigración, el Código Penal y el Derecho Sucesorio, además de lanzar un plan Marshall para los suburbios empobrecidos.

Las reformas clave del conservador incluyen la flexibilización de las horas de trabajo semanales, la exoneración fiscal de las horas extras y la supresión de los derechos de sucesión para el 90% de los franceses. Además pretende garantizar un servicio mínimo en los paros de transporte y obligar por ley a los desempleados a tomar empleos ofrecidos. También planea rebajar la edad de inimputabilidad a los 16 años, instaurar penas mínimas para los reincidentes y hacer más difícil a los inmigrantes el traer sus familias a Francia.


Nombres en danza
Sarkozy dejó París en la mañana de ayer con su esposa Cecilia y su hijo y pasará unos días en la isla de Malta para recargar sus baterías Este descanso fue planeado para ponerlo en la perspectiva de un presidente luego de la tumultuosa batalla dijo su asesor Claude Gueant

Se espera que el futuro mandatario designe a su director de campaña, François Fillon, como primer ministro, y que nombre a mujeres para la mitad de los 15 puestos de su compacto gabinete. Como "polo de izquierda" podría formar parte del gobierno Eric Besson, que durante la campaña pasó de las filas socialistas a las de Sarkozy. El neogaullista y ex jefe de gobierno Alain Juppé se baraja como posible ministro de Exteriores, mientras que la actual ministra de Defensa, Michele Alliot-Marie, repetiría en el cargo. Analistas aseguran que el Ministerio de Finanzas perderá poder durante la gestión de Sarkozy, ya que él mismo se pondría al frente de las esperadas reformas económicas.

Nicolas Sarkozy dejó un hotel de París para viajar a la isla de Malta.