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jueves,
03 de
mayo de
2007 |
Leprosos y canallas en contacto por TV
Decir que el clásico de la ciudad es uno de los más importantes y pasionales del fútbol argentino no es verso. Por más que las campañas de Newell's y Central sean mediocres, eso no habilita a que se mantenga la trascendencia de siempre. O más. De hecho, ayer TyC Sports transmitió en vivo desde Rosario durante más de cuatro horas en distintos programas que se emiten cerca del mediodía. Y ahí Justo Villar, Nicolás Spolli y Germán Ré, por el lado leproso, y Carlos Ischia y Cristian Alvarez tuvieron la chance de encontrarse y de mostrar que el fútbol debe vivirse con intensidad, pasión, camaradería y folclore.
El primer encontronazo del día lo protagonizaron Spolli con el DT canalla. Después del saludo formal y antes de retirarse del estudio, Ischia le preguntó al Flaco: "¿Cuál es el tobillo que tenías lesionado? Porque me olvidé de pegarte". Ante las risas de los presentes, Spolli no se quedó atrás y espetó: "No importa si me pegaba en el tobillo, porque en realidad yo tenía una molestia en el aductor, je".
El show de Ischia no quedó ahí, porque enseguida se encontró con Ré y Villar, a quienes saludó cordialmente y les deseó un buen partido. "Buena suerte muchachos, menos para el domingo, je", tiró el DT, que no quiso dar la formación cuando se lo consultó diciendo que "es cierto que llevo poco en la cabeza, pero hay lugar para tener el equipo, je".
El Colorado, por más serio que parezca, es uno de los tipos de mayor humor en el plantel rojinegro. Si hasta amenazó, mientras aguardaba salir al aire, con llevarse algunos cubiertos del ágape preparado para la ocasión e, incluso, persiguió a uno de los productores con el ticket de estacionamiento de autos para que se hiciera cargo de pagarlo.
Justo no se quedó atrás y cuando uno de los conductores de Estudio Fútbol mencionó al pasar la palabra "frialdad", el arquero aprovechó para replicar al instante y puso en una situación incómoda al periodista, que no encontró la forma para salir del mal momento.
El clásico se vive y se siente con enorme intensidad. Por suerte los tiempos van cambiando para bien, tan es así que ahora leprosos y canallas pueden juntarse sin ser mal vistos. Entendiendo que esto es sólo fútbol. Y el folclore, está claro, es lo que viste a un partido.
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