Con el nombre de Mario Corea

El arquitecto rosarino presentará el libro que resume los últimos 20 años de su carrera

Aníbal Fucaraccio / La Capital

El arquitecto rosarino Mario Corea Aiello será reconocido el martes, a las 19, en el Auditorio del Banco Municipal. El homenaje a este destacado profesional de la ciudad que reside en Barcelona consistirá en la presentación de un libro de 500 páginas que resume una selección de proyectos y obras de sus últimos 20 años de carrera. Para él, será una forma de volver y sentir que, a pesar de que tuvo que dejar Rosario perseguido por el Proceso, sigue acá.

"Mario Corea arquitectura: 1985-2005". Así se titula la publicación que se editó en España y que ya se presentó el viernes en la Sociedad Central de Arquitectos de Buenos Aires. El texto cuenta con una crítica de Jorge Pancho Liernur y una entrevista realizada por Freddy Massad y Alicia Guerrero.

Del acontecimiento participarán arquitectos y amigos que se relacionaron con Corea en su transitar profesional como Marcelo Villafañe y Rubén Palumbo, entre otros.

Corea tiene 67 años, trabaja hace 30 años en Europa y en Rosario es autor de obras emblemáticas como la del Centro Municipal de Distrito Oeste "Felipe Moré" y del nuevo Hospital de Emergencias Clemente Alvarez (Heca), que aún no se finalizó. Es master en arquitectura en Harvard, fue diplomado en estudios urbanos en Londres, profesor en la Universidad Politécnica de Barcelona y profesor invitado en diversas casas de altos estudios de Estados Unidos, Bélgica y Argentina.

-¿Qué significa este libro en su carrera?

-Por un lado es construir un hito en la carrera con una recopilación de trabajos que tendrán una difusión internacional. Es emocionante y lo vinculo con un reconocimiento a mi trayectoria. Pero lo más importante para mí es poder estar en mi país y en mi ciudad. Lo peor que te puede pasar cuando te vas es que te olviden y este libro me permite volver a contactarme con los míos, seguir estando en mi lugar. Yo siento que me tuve que ir, pero no me fui nunca.

- Se fue a Europa por cuestiones políticas escapando de los militares. ¿Soñaba en ese momento con este tipo de regresos, con obras y reconocimientos?

-La verdad es que me fui muy mal. No quería alejarme de mi lugar y mi gente. Todavía escucho a diario al Polaco Goyeneche pero no lo hago con nostalgia. Nunca pensé que iba a tener la suerte de volver, de hacer obras y de que me publiquen un libro en Europa. Nunca imaginé conseguir un lugar en la arquitectura catalana. Cuando me fui pensé que era como un destierro y que iba a tener que hacer cualquier cosa para sobrevivir. Por suerte pude reencauzar mi vida.

-¿Qué vio cuando repasó el libro?

-Cuando me pidieron la selección de las obras tuve mi primera reflexión teórica crítica sobre mi propio trabajo. Y lo primero que vi es que no hay estridencias. No hay una percepción fácilmente mediática y al mismo tiempo es autónoma y no depende de las corrientes de moda. Hay una serie de ideas que se mantuvieron durante el tiempo. Siento coherencia y unidad. Y fue una alegría redescubrir eso con el libro.

-¿Existe un mensaje que intentó trasmitir?

-Sólo transmito mi idea de la arquitectura. Está la forma en la que miro mi obra y el mundo. Y creo que se advierte un Mario Corea bastante real.

Este reconocido arquitecto de Rosario admite que esta experiencia lo movilizó y proyectó su labor a horizontes más lejanos. "Todo esto me entusiasmó tanto y me enriqueció de tal manera que ya estoy pensando que puede haber un segundo tomo en los próximos años, con nuevas conclusiones que me permitan seguir adelante", concluyó Corea.