La Constituyente, bloqueada y sin salida

Antonio Martínez / EFE

La Paz. - La Asamblea Constituyente no ha redactado ni un artículo en ocho meses de sesiones y muchos dudan que llegue a "refundar Bolivia" en los cuatro que le restan, como reclama el presidente Morales.

La Constituyente desperdició siete meses en discutir su reglamento, porque Morales intentó cambiar las reglas de juego pactadas, y ahora lleva varias semanas recorriendo el país, por lo que muchos analistas opinan que ni gobierno ni oposición quieren realmente que se redacte una Constitución.

Morales acusa a la oposición de buscar el fracaso de la Asamblea "por las buenas o por las malas", sus adversarios denuncian que él pretende eliminar otros poderes que no controla para perpetuarse en el cargo, y fuentes diplomáticas comentan que ambas partes pueden tener razón al mismo tiempo.

El constituyente conservador José Antonio Aruquipa declaró que su grupo tiene plena intención de cumplir su mandato en la Asamblea, pero reconoció que "el tiempo es cada vez más corto y los esfuerzos cada vez más infructuosos".

"Lo que empezó como un escenario de debate democrático para resolver los problemas de Bolivia se ha convertido por obra del presidente en un mero instrumento de prorroga en el poder", añadió. Analistas y diplomáticos coinciden en que el escenario más previsible es el fracaso de la Constituyente, porque no se vislumbra ninguna posibilidad de acuerdo.


Apuesta al fracaso
Muchos opinan que los opositores desean el fracaso de la Asamblea porque creen que perjudicará a Morales pero que el gobierno tampoco quiere un pacto porque implicaría muchas concesiones y porque tiene un Plan B Esa supuesta alternativa consiste en que Morales culpará a la oposición del fracaso y presentará su proyecto constitucional a un referendo que lo aprobará por mayoría en vez de los dos tercios que le hacen falta ahora en la Constituyente

El constituyente oficialista Marco Carrillo explicó que si no hay acuerdo de dos tercios antes del 2 de julio "se va directamente a consulta ante el pueblo soberano". Morales podría ganar ese referendo porque fue elegido en 2005 con el 53,7% de los votos, su Movimiento al Socialismo (MAS) tuvo el 50,7% en 2006 y el presidente mantiene niveles altos de popularidad.

El "Plan B" lo confirma el MAS al preparar, no una, sino dos reelecciones de Morales, en 2008 y 2013. El vicepresidente del MAS, Gerardo García, dijo al diario La Razón: "Este ha sido nuestro objetivo desde la fundación. Los sectores (afines) consideran que Evo Morales se debe quedar 50 años o más".