China prohíbe la venta de órganos

China formalizará una prohibición a la comercialización de órganos humanos, señaló ayer un medio oficial, en busca de ajustar más la regulación de un mercado que los críticos señalan está lleno de prácticas ilegales. Según esos detractores, los procedimientos ilícitos generalmente involucran el comercio de órganos de prisioneros ejecutados.

La regulación, emitida por el Consejo de Estado chino, o gabinete, será efectiva desde el 1º de mayo y no se aplicará a trasplantes de tejidos humanos, incluidas células, córneas y médulas.

"La normativa estipula que los trasplantes de órganos humanos deberían respetar el principio de donaciones voluntarias y libres", señaló la agencia de noticias estatal Xinhua.

El año pasado, China tomó medidas duras relacionadas con el comercio y uso lucrativo de los cuerpos y el Ministerio de Salud fijó reglas que prohíben la venta de órganos humanos.

La regulación del Consejo de Estado formaliza la prohibición y le da mayor fuerza legal.

Los hospitales también precisan el consentimiento escrito de los donantes y el número de centros a los que se permite realizar operaciones de trasplante es restringido.

Los grupos de derechos humanos acusaron a los hospitales chinos de volcarse hacia las ventas lucrativas de órganos y trasplantes para aumentar sus fondos, y dijeron que muchos de los órganos provienen de prisioneros ejecutados.


Demanda millonaria
Alrededor de 2 millones de personas necesitan un trasplante en China cada año pero sólo se llevan a cabo 20.000 cirugías debido a la escasez en un país donde los tabúes religiosos y culturales han demostrado ser tradicionalmente un impedimento para la promoción de las donaciones

En otro orden, ayer se precisó que China no está invirtiendo lo suficiente para luchar contra el sida y el gobierno, que finalmente parece estar tomando el tema seriamente, aún necesita hacer más para detener la epidemia, según sostuvo un panel de expertos y trabajadores de la salud.

La discriminación se expande y la ignorancia perjudica la prevención y los esfuerzos de atención médica, agregaron los especialistas.

Los especialistas de Naciones Unidas y el Ministerio de Salud de China estiman que alrededor de 650.000 chinos viven con sida en el país, y aseguran que la enfermedad se está trasladando a la población general y expandiéndose más rápido que nunca. Aun así, la prevalencia es mucho menor que en Estados Unidos. l (Reuters)