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domingo,
18 de
marzo de
2007 |
Recuperó la conciencia el santiagueño que mató a su novia y suegro
Santiago del Estero.- El joven sospechado de haber asesinado a su novia y al suegro en una lujosa residencia del centro santiagueño recuperó hoy la conciencia mientras permanece internado en la sala de terapia intensiva de un sanatorio capitalino.
Los cirujanos del Sanatorio Alberdi le extrajeron al muchacho los dos proyectiles que habían quedado alojados en el cráneo, pero que no habían afectado el cerebro.
Por esta razón, los médicos señalaron que el paciente José Roberto Pichi De Yebra Uñates, estudiante de Abogacía, presentó una “notoria recuperación” al recuperar la conciencia.
En tanto, efectivos de la comisaría 1ª y de la División Delitos Comunes mantenían una guardia permanente frente al ingreso del sector donde está alojado el joven.
El juez penal de turno, Ramón Tarchini Saavedra, le imputó doble homicidio y homicidio en grado de tentativa.
Las hipótesis que se barajaban sobre el drama es un pedido de la chica para terminar con el noviazgo, por supuesta influencia de sus padres, así como también se investigaba el reclamo que el estudiante de Abogacía le habría hecho a su novia por una presunta infidelidad.
La tercera versión es que la chica podría haber sido estrangulada durante un juego sexual.
Ayer, De Yebra Uñates, de 27 años, se encontraba en la mansión situada en la Avenida Belgrano sur 733, donde residía la familia de reconocidos empresarios.
Allí, el joven habría asesinado a su novia Carolina Curi, de 25 años, y su padre, Carlos Curi, de 73, mientras la madre de la chica, Marcelina Vizgarra, de 54, resultó gravemente herida y permanecía internada esta tarde en el Hospital Regional.
La mujer sufrió un amplio corte en el abdomen pero que no llegó a afectar ningún órgano vital, según dijeron fuentes del centro asistencial público donde está alojada.
Por otra parte, los investigadores procuraban develar a quién le pertenecía el revólver calibre 22 corto que fue secuestrado en la habitación donde se había refugiado Pichi De Yebra Uñates y con el que se habría disparado.
Según se supo, la empleada doméstica de la familia Curi, Beatriz Gerez, de 41 años, alertó a una patrulla del Comando Radioeléctrico, luego de oír gritos y hallar a su empleador en el ingreso de la casa, bañado en sangre.
La trabajadora salió a la calle a pedir auxilio e inmediatamente dos efectivos ingresaron, presumiendo que se había producido un asalto, cuando eran las 6.20 de ayer.
En el vestíbulo estaba el padre de la chica con vida -quien horas más tarde falleció- mientras que en una galería contigua al patio encontraron a Carolina Curi estrangulada con una soga.
En un pasillo de la planta alta, la dueña de casa pedía auxilio y en otra habitación se había guarecido el novio de la chica, apodado Pichi.
Minutos después, cuando llegó personal del grupo de elite de la Policía provincial, el Getoar, al derribar la puerta de la pieza donde se había refugiado De Yebra Uñates, éste se disparó en la sien izquierda con un revólver calibre 32, según el informe policial. (DyN)
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