|
sábado,
17 de
marzo de
2007 |
Newell's volvió a ganar: ya van tres al hilo
Doblegó al empinado Arsenal en su reducto de Sarandí por 3 a 2
Aníbal Fucaraccio / Ovación
La mano de Pablo Marini construyó un nuevo Newell's. Este equipo no sólo cambió por completo su semblante y enterró viejas mochilas repletas de lamentos y estadísticas nefastas, sino que también se está acostumbrando a ganar. Su técnico encontró la anhelada receta. Esta vez, Newell's venció a Arsenal en el Viaducto porque supo poner la otra mejilla cuando la historia venía cambiada y porque aprovechó con inteligencia el hombre de más que provocó la expulsión del arquero Cuenca. Así le dio forma a otro triunfo, concebido con la efectividad demoledora de Cardozo, con el criterio que aportaron los experimentados en su regreso al equipo y con el mismo corazón que mostraron los pibes en la fecha pasada ante Argentinos.
El primer tiempo en Sarandí fue una montaña rusa de emociones. Newell's arrancó descompensado y algo inconexo. Arsenal copó el mediocampo, lastimaba por las bandas y confundía con la movilidad de Raymonda y Obolo. Pero los dos equipos ofrecían grietas y por eso se multiplicaban las chances de riesgo. Por eso no fue extraño que a los 15 minutos Arsenal abriera la cuenta luego de un tiro libre, que Ré metió involuntariamente en contra de su arco, cuando ingresaba marcando a Castiglione.
El golpe fue rápidamente asimilado por Newell's, que contestó a los 19' con la pólvora de Tacuara que clavó un potente derechazo tras un centro bajo de Arrieta. Todo volvía a foja cero.
Pero el partido seguía regalando condimentos interesantes bajo la lluvia. A los 23' un remate largo de Ortiz, que rozó otra vez en Ré, estampó el 2 a 1. La Lepra no lo podía creer pero mantenía su apuesta inicial.
Fue así que a los 37', Araujo tiró un centro pasado, que fue interceptado por Lucero, quien entrando por izquierda remató de zurda, y como Cuenca no contuvo la pelota (ver aparte), se la sirvió a Cejas para la igualdad. El arquero de Arsenal protestó, vio la roja y le regaló la iniciativa y el partido a su rival.
En el complemento, que tuvo un andar más sereno que el inicial, Newell's trabajó con tranquilidad las acciones. Buscó sacarle rédito a su jugador de más y le dio aire a las bandas con los ingresos de Pérez y Peralta.
Y a los 68' llegó la explosión leprosa, con la fórmula de los delanteros. Cejas habilitó desde la izquierda a Cardozo y el paraguayo se llenó el botín con el gol del triunfo. Newell's utilizó los últimos minutos para mantener la ventaja conseguida. Supo aguantar con entrega y sacrificio. También esperó el pitazo final del árbitro Beligoy sabiendo que la victoria estaba a resguardo.
Por eso fue el goce pleno. Un delirio leproso bajo la lluvia. Una verdadera fiesta. El tercer triunfo al hilo bajo la conducción técnica de Pablo Marini.
enviar nota por e-mail
|
|
Fotos
|
|
Loeschbor logra interponerse al bombazo de Cardozo, que estuvo implacable.
|
|
|