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sábado,
17 de
febrero de
2007 |
El rock dio el presente pero
el gran público faltó a la cita
Ratones Paranoicos y El Vagón coparon la apertura del Florida Rock, que fue reprogramado
Pedro Aquillaci / La Capital
El Florida Rock arrancó el jueves con luces y sombras. Lo positivo fue la alta performance de las bandas, preferentemente Mr. Mojo, El Vagón y Ratones Paranoicos, y lo negativo fue la escasa respuesta que le dio el público al encuentro. Tanto fue así que el show del viernes se suspendió para el sábado cuando el mal clima había pasado, con la supuesta intención de reunir para el cierre a las figuras más convocantes, como Pericos y Kapanga, y dejando en el camino seis bandas locales que cayeron presas de la reprogramación (Pandora Box, Limandras, Dubies, Alegre No Tanto, Mercurio y Broken Toys). Aunque los organizadores estimaron que el show de apertura convocó "unas mil personas", no hubo más de quinientos asistentes al recital del jueves, que contó con la presencia de los teloneros Sin red, Vendaval y Lander, y ya como números fuertes a Mr. Mojo, liderados por el Bonzo Morelli; El Vagón, la ascendente banda de Pavón Arriba, y los eternos Ratones, de la mano del interminable Juanse y su rock tan básico como irresistible.
El público eligió sentarse en la arena para disfrutar del show, algunos con sus equipos de mate a cuestas; y hubo quienes prefirieron mirar el espectáculo gratis desde sus embarcaciones. No faltaron los que armaron el pogo de ocasión con remeras al viento, mientras otros simplemente bailaron al compás del rock y el blues, que fue variado y del bueno.
El primer plato fuerte fue Mr. Mojo, quienes con la dupla conformada por Morelli, en guitarra, y Fabricio Rodríguez, en voz y armónica ofreció una perlita de la historia del rock nacional, "El fantasma de Canterville", inyectó rock con "Ahora", y aportó una canción con matices como "Algo sagrado", con la presencia de Panchito Chevez, quien también fue invitado a tocar por El Vagón y Ratones Paranoicos.
El Vagón llegó con su menú blusero y agitó a los fans. Con la voz expresiva de Julián Miretto y la potencia de Gerardo Grotta en el bajo, la banda demostró que sabe rockear, como lo hizo en el homenaje a Pappo con "Rock and roll y fiebre"; ir a un plano más intimista como en "Artesano" y "Por quererlo todo" y echar mano a un buen blues, como ocurrió en "Mujer al fiado". Ike Parodi, como invitado, se convirtió una vez más en la mejor expresión del Robert Plant rosarino y no precisó escaleras para poner el grito en el cielo.
Eternos
Cuando el viento de la noche a orillas del río ya obligaba a buscar un abrigo llegaron los Ratones Paranoicos y levantaron la temperatura ambiente
"Rock del pedazo", "Sucia estrella", "No me importa tu dinero", "Rock del gato", "Cowboy", "Isabel" y "Vicio" armaron un cocktail explosivo, sumados a "El tren de las 16" y "Ruta 66", con Panchito Chevez, y en otro guiño para el Carpo.
El bis llegó con "Sigue girando", con Juanse en cueros trepado a las altas estructuras del escenario. Para que el rock siga sonando hasta en las nubes.
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Fotos
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Los Ratones Paranoicos aportaron toda su energía a un ciclo que no tuvo la cantidad de público esperada.
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