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 sábado, 30 de septiembre de 2006  
Reclamo por soberanía en Malvinas
Kirchner pidió no apurar los tiempos electorales
El presidente se acercó Sobisch. Le agradeció el buen trato que le dispensó en Neuquén y lo llamó "pingüino". Los "radicales K", presentes

El presidente Néstor Kirchner advirtió ayer a la dirigencia política que "es hora que se entienda que las luchas electorales se hacen en el tiempo debido", al hablar en la provincia de Neuquén, donde compartió un acto junto al gobernador Jorge Sobisch.

En tierra de uno de los opositores al gobierno nacional y casi seguro postulante presidencial en los comicios del año próximo, Kirchner eligió un discurso de tono conciliador porque -aclaró- no fue a Neuquén "a hacer proselitismo" sino a "honrar" la memoria de los combatientes en Malvinas.

No obstante, sobrevoló en el ambiente un clima dialoguista entre ambos mandatarios, lo que generó algunas suspicacias entre los kirchneristas presentes, incluso hasta hablar de un "acercamiento" del neuquino al santacruceño, mas allá de la candidatura presidencial de Sobisch.

Otro dato político fue la presencia de los mandatarios radicales de Mendoza, Julio Cobos, y de Río Negro, Miguel Saiz, cuestionados por su partido por respaldar el proyecto del oficialismo desde le denominado grupo de los radicales K.

Incluso el nombre de Cobos es uno de los que circula como posible integrante del binomio presidencia si Kirchner se presenta para la reelección en el 2007. Saiz, por su parte, podría acordar con el presidente su candidatura para un nuevo mandato en Río Negro.

"Es hora de que los argentinos entendamos que las luchas electorales se hacen en el tiempo debido", dijo el jefe del Estado. Luego apeló a la coincidencia ciudadana para recordar a los veteranos de guerra y convocó a la unidad.

Fue entonces que entró de llenó en el tema político, y en el mismo tono de conciliación advirtió: "No podemos estar en mezquindades o en tiempos cortos".

Durante su discurso, el jefe del Estado agradeció a Sobisch y a su esposa "por el afecto" con que fue recibido, y hasta lo englobó en su calidad de patagónico como otro "pingüino".
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Sobisch y Kirchner se mostraron juntos.

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