Acciones para que el miedo no se imponga

Javier Felcaro / La Capital

No dejarse ganar por el miedo. Esa fue la premisa que querellantes en las causas por violaciones a los derechos humanos durante la última dictadura militar en Rosario ratificaron en el octavo día sin noticias de Jorge Julio López, el testigo clave del caso que desembocó en la reclusión perpetua por genocidio del represor Miguel Etchecolatz.

Ana Oberlin (Hijos) aseguró ayer a La Capital que las manifestaciones registradas en todo el país implican "una respuesta clara y colectiva de que no les tenemos miedo y que hay medios en un Estado democrático para defenderse de los grupos que quieren imponer terror".

Tampoco dudó en atribuir lo ocurrido en La Plata al accionar de "grupos que se sienten afectados por el hecho de ser llevados a juicio y terminar encarcelados, involucrando a todos los niveles de jerarquía" que actuaron al amparo de la represión ilegal.

Gabriela Durruty, en tanto, reveló que los integrantes del Equipo Jurídico de Derechos Humanos se mantienen conectados permanentemente a una red de abogados a nivel nacional.

"A pedido de los letrados de La Plata, y por unanimidad de criterio, decidimos profundizar las causas, solicitando la misma figura aplicada a Etchecolatz en los casos en los que aún no se haya hecho y reiterando el reclamo en aquellos expedientes en los que sí se planteó", explicó.

Gastón Chillier, director ejecutivo del Centro de Estudios Legales y Sociales (Cels), había considerado necesario que se empiece "ya a discutir una política de seguridad para testigos".

Aunque la opción de un resguardo estatal halló dudas entre allegados a las causas que se instruyen en Rosario, que deslizaron interrogantes: "¿Pedirle ayuda a la policía?, ¿y a la Side, que no puede resolver la desaparición de López?".

En tanto, el subsecretario de Derechos Humanos, Domingo Pochettino, opinó que los volantes distribuidos el lunes pasado en la ciudad de Santa Fe (con la leyenda "López: desaparecido 30.001. ¿Quién será el 30.002?") apuntan a "intimidar a los testigos" de los expedientes por la represión. Hoy habrá una marcha de repudio en la capital provincial.

Otros allegados a las investigaciones admitieron la necesidad de buscar un sistema de protección "para que todos se sientan resguardados y confiados, tomando recaudos para los testigos y querellantes". Y enfatizaron que "la respuesta a actos patoteriles y antidemocráticos es no tener miedo".