NACIONAL DE CLUBES

Jockey, un triunfo ajustado pero justo

Venció a Atlético del Rosario por 14-13 en la primera fecha del torneo. Hubo poco rugby y muchos nervios

Pablo F. Mihal / La Capital

Estuvo lejos de ser un partido recordado por el buen juego. Tal como había ocurrido en 1995 y 1999, el clásico entre Jockey y Atlético del Rosario fue cerrado y de un marcador cambiante que sólo tuvo dueño con el pitazo final del árbitro. Ayer, el encuentro que cerró la primera fecha del Nacional de Clubes 2006 no fue la excepción ya que hubo poco rugby y muchos nervios y un ganador que rompió la paridad existente entre ambos en este torneo (ambos tenían una victoria en su haber). Ese fue Jockey Club, que se impuso por un ajustado 14-13, resultado que muestra a las claras lo que pasó dentro del campo de juego.

Desde el arranque Jockey fue el que arriesgó más y en líneas generales el que se equivocó menos. Pero no fue eso lo que lo llevó a cantar victoria, sino su mayor ambición, su actitud de pelear cada pelota como si fuera la última y de no bajar los brazos aún en los momentos más difíciles.

El ejemplo más claro y contundente es el try del final, el de Juan Baetti, nada menos que el que le dio el triunfo al conjunto verdiblanco. A los 42' con un penal de Todeschini Plaza casi aseguraba la victoria al llevar el marcador a un 13-9 que hasta pareció inalterable, sobre todo teniendo en cuenta que Jockey jugaba con 14 hombres ya que Pablo Sapene había sido amonestado. Pero el amor propio pudo más y Jockey fue a buscar con el orgullo herido ese error que le podría devolver la alegría. Necesitaba un try y lo buscó hasta que lo encontró.

En la salida post penal presionó hasta que generó un penal. Como con éste no le alcanzaba se vio obligado a jugar. El juego se desplazó hacia la derecha del ataque y cuando la pelota voló raudamente hacia la izquierda encontró el hueco que necesitaba. Atlético marcó mal y en el abierto quedaron los forwards, que poco pudieron hacer con la velocidad de Pucciariello que juntó las marcas y la definición de Juan Baetti que le puso la cereza al postre.

Jockey mostró como sus mejores atributos un buen line, una defensa importante con la que recuperó muchísimas pelotas y por sobre todas las cosas mucho compromiso de sus quince hombres para alcanzar el objetivo, no sin sacrificio.

En la otra vereda Plaza jugó mal. Abusó mucho del pie, tuvo poco juego de conjunto y sus individualidades nunca aparecieron. De la intrascendencia el único que zafó fue Sebastián Baetti, quien fue el que al menos más intentó. El resto del equipo navegó en la desidia como si en algún momento alguien podría frotar la lámpara y quedarse con el duelo. Algo de eso pasó en el try de Risler, un try que más que generarlo lo encontró. Y eso, como a la hora de sumar suma, a la de restar resta.

Y así lo pagó, casi en el acto, ante un Jockey que corriendo y con mucho corazón se quedó con el clásico.

Juan Baetti y Pucciarello detienen la carga de Orengo.