Una ofrenda de paz psicodélica

Roger Waters desembarcó en Israel, en el marco de la gira mundial que comenzó tras la reunión de Pink Floyd para el concierto de Live 8 que se celebró el año pasado en el Hyde Park de Londres. El músico británico, que ofreció una aclamada actuación en la última edición del festival de Rock in Río que se llevó a cabo en Portugal, eligió Medio Oriente para su presentación como ofrenda de paz entre judíos y palestinos. "Quiero expresar mi solidaridad con las voces de la razón que se alzan en busca de una solución pacífica del conflicto que enfrenta a estos dos pueblos", aseguró el cantante y bajista en la rueda de prensa de lanzamiento de la presentación en el monasterio Latrum, en Neve Shalom, a medio camino entre Tel Aviv y Jerusalem.