|
domingo,
18 de
junio de
2006 |
Una bella ruta de cruceros
Lujo, aventuras, entretenimiento y placer condimentan los viajes marítimos con opciones para todos los gustos
Paola Irurtia / La Capital
Vida de lujo sobre olas ha sido el leit motiv de las empresas de cruceros, esas moles que atraviesan mares y océanos con cada vez más entretenimientos en sus entrañas. Pero las propuestas de las compañías se renuevan junto a su flota. Así, Royal Caribbean se inclina por sumar aventuras y Costa Cruceros incorporó el mayor spa en el mundo de la navegación, mientras empresas como Star Clippers busca rescatar el encanto de las velas para sus paseos por los mares europeos en un universo que sigue en expansión.
La empresa Royal Caribbean International asegura creer que "las vacaciones deben ser algo emocionante y memorable, además de ofrecerle la oportunidad de desafiarse a sí mismo como nunca pensó que podría hacerlo". Ofrece para eso su barco Freedom of the Seas, una mole con "atracciones de vanguardia".
El Freedom of the Seas está considerado como el barco de cruceros más grande del mundo que se incorporó a la flota este mes.
Una de las atracciones que ofrece es surfear a bordo del barco, lo que logra a partir de un simulador de olas ubicado en una de sus piletas. "Podrá sentir la emoción de elevarse en una ola perfecta, cualquiera sea su nivel de destreza, ya sea que quiera mantenerse de pie sobre la tabla o simplemente sostenerse boca abajo y disfrutar del ascenso", describe la empresa antes de prometer que el cliente "vivirá una experiencia inolvidable". Aunque pase días navegando sobre la mayor superficie de agua del planeta, otra de las atracciones es un parque acuático, una zona con fuentes, esculturas interactivas, géiseres y cascadas "para que no quede nada seco".
Otro de los ambientes que propone es un soliarium "sólo para adultos" decorado con fotos de arrecifes y oasis selváticos, que permite escuchar música debajo del agua y soltar tensiones en jacuzzis de hidromasajes.
Todos los barcos de la cadena ofrecen una pared de escalar que permite ver el mar desde 65 metros de altura, con una variedad de recorridos posibles para llegar a la "cima".
A la italiana
La compañía Costa Cruceros, que ofrece viajes por la costa de Sudamérica y el Caribe, trabajó sobre los conceptos de armonía y relax en su barco Costa Concordia, un barco isla que, promete, "se convierte en un destino más" del viaje.
El encanto de la nave es el samsara spa, un área de spa al que muchos de sus 500 camalotes tienen acceso directo. El spa tiene termas, espacios de talasoterapia y gimnasios, con enormes balcones al mar.
Los barcos de la compañía Costa son verdaderos casinos flotantes, con salas de juego grandes y pequeñas y máquinas tragamonedas.
El concepto de "crucero de bienestar" lo extiende a sus centros gastronómicos, aunque llevan a cuestas espacios de compras o centros de belleza. En cuanto al contacto con la imponencia del reino de Neptuno, el barco tiene camarotes con balcones, paredes transparentes y ascensores de hasta nueve pisos para tener una visión panorámica absolutamente confortable.
La Mediterranean Shipping Company (MSC) es una compañía italiana con una larga historia en los mares, dirigida por el capitán Gianluigi Aponte. Se incorporó a la industria de los cruceros en 1988 después de adquirir el Starlauro, una compañía de barcos prestigiosa, y de ejecutar una renovación y relanzamiento de la flota, que proclama como eje de trabajo la "innovación". Sus barcos recorren Europa de marzo a noviembre y de diciembre a marzo navegan por Argentina, Brasil, Sudáfrica y el Caribe.
La última incorporación es el MSC Sinfonía, llamado European Stars antes de su renovación. Presentado como un "tesoro de tecnología y el confort", la personalidad se la otorga la presentación de los puentes, adornados con cuadros de casi un centenar de pintores europeos.
Dentro del barco, el placer se explaya hacia el centro de talasoterapia o de masaje indonesio, pasando por un baño turco con aromaterapia.
Lujo mediterráneo
Entre otras compañías europeas, aunque no llegan hasta las costas sudamericanas, Star Clippers se volcó a los paseos de lujo en combinación con la tradición náutica. "El aspecto romántico de un velero es también un universo moderno y cómodo", asegura la compañía.
El paseo en sus naves promete incursionar en "otra era de la navegación", en el que primaba el encanto de la marina a vela. Sus decorados, con litografías y antiguos cuadros de barcos famosos, recuerdan la edad de oro de los veleros. Entre sus comodidades, las piscinas, saunas, salas de masaje y biblioteca. En su flota se encuentra el Royal Clipper, creado a la imagen del legendario Tall Ship Preussen, el más grande y rápido velero del mundo y el único de cinco palos.
La Norwegian Cruise Line, adquirida por Star Cruises, se acerca a las costas del sur cada diciembre y ofrece surcar los mares más remotos en un estilo libre. Cuidadosos del confort, aunque con una oferta más acotada, la compañía se promociona como la única en alentar el "freestyle cruising" en el que "no importa la hora de comer, ni la forma de vestirse". Su propuesta en Sudamérica parte de Montevideo hacia Buenos Aires y va hacia Ushuaia para subir por los fiordos chilenos hasta el puerto de Valparaíso.
Entre los barcos más espectaculares, la compañía británica Cunard atesora al Queen Mary, el más lujoso y más grande, y también uno de los más costosos.
Los entendidos aseguran que para elegir, junto a las distintas propuestas, lo que importa es la bandera. "El carácter del país está presente en los barcos", aseguran. Por eso se imponen la calidez italiana en Costa o la sobriedad en Royal Caribbean y Cunard.
enviar nota por e-mail
|
|
Fotos
|
|
|