Exonerados por golpear menores en una comisaría

Un teniente y un sargento de la policía bonaerense fueron exonerados de la fuerza por el ministro de Seguridad de la provincia, León Arslanián, acusados de haber golpeado ferozmente a dos adolescentes en una comisaría de San Nicolás en abril de 2005. Los policías serán juzgados en un proceso oral y público por cometer apremios ilegales en contra de los jóvenes. Un episodio similar fue denunciado en Rosario la semana pasada por menores que revelaron haber sido lesionados en la seccional 11ª.

  La medida fue adoptada contra el teniente Elvio Adrián Da Silva y el sargento Santiago Roberto Díaz, quienes prestaban servicio en la seccional 1ª de San Nicolás. Allí, hace poco más de un año, fueron trasladados dos jóvenes para averiguación de identidad que, según denunciaron luego, sufrieron un grave tormento físico por parte de los policías.

  En el caso de San Nicolás, según un parte de prensa difundido por la cartera que conduce Arslanián, todo comenzó cuando los policías caminaban vestidos de civil por la calle Nación entre Urquiza y Francia y “se cruzaron con seis menores con los que discutieron porque uno de ellos, supuestamente, los había mirado mal”. Así lo determinó una investigación de la división de Asuntos Internos de la fuerza.

  Los chicos fueron trasladados hasta la seccional 1ª “para averigüación de identidad”. Dentro de la comisaría, dos de los adolescentes fueron llevados a la oficina de identificación, donde recibieron fuertes golpes. “¿Ustedes son los que se hacían los malos?”, preguntaron los agentes ahora exonerados a los adolescentes, para luego aplicarles “una feroz golpiza que les provocó lesiones en el rostro y en diversas partes del cuerpo”, precisó el comunicado.

La denuncia del padre

  “La grave conducta de los policías quedó al descubierto gracias a la denuncia efectuada por uno de los padres de las víctimas y por el relato de varias mujeres que se encontraban circunstancialmente en la dependencia”, se informó. Las testigos dijeron haber presenciado la golpiza y haber escuchado los gritos de los chicos una vez que los agresores cerraron la puerta de la oficina donde se desarrollaron los hechos.

  Una de las víctimas contó que, antes del traslado a la seccional, se cruzó por la calle con uno de los policías que vestía de civil, quien sin aparente motivo lo increpó mientras exhibía una pistola reglamentaria: “¿Qué mirás? ¿Sos malo? ¿Querés pasar toda la noche en la comisaría?”.

  Asimismo, el otro efectivo arremetió: “A éste tirale un tiro en las piernas”, consigna el parte de prensa. La exoneración constituye la sanción administrativa más grave que aplica la policía, ya que implica la separación definitiva de la fuerza y la pérdida de todos los beneficios inherentes al cargo, así como “un obstáculo casi insalvable para volver a desempeñarse en cargos públicos”, indicó el Ministerio de Seguridad. (DYN)