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sábado,
10 de
junio de
2006 |
El padre Grassi rechazó la pericia sobre perfil de "delincuente sexual"
Buenos Aires.- Una pericia psiquiátrica realizada al sacerdote católico Julio César Grassi, por una causa abierta en Santa Cruz en la que se lo acusa de haber cometido abuso sexual contra un menor, concluyó que tiene “indicadores similares del perfil psicológico de un delincuente sexual”, aunque el sacerdote negó hoy la veracidad del informe.
Grassi rechazó por “falsa” la pericia psiquiátrica ordenada por el Juzgado de Instrucción 1 de Santa Cruz en el expediente 37.306/2003 que investiga el presunto delito de abuso sexual cometido por el religioso contra un menor identificado como Luciano y que fue realizada en agosto del año pasado.
“No hubo ninguna conclusión de la pericia, faltó completarla y es más, mis abogados presentaron la impugnación, por lo cual yo creo que esto es para hacerme pasar un papelón social”, aseveró Grassi a Télam, ante quien pidió derecho a réplica.
“Alguien generó este material, porque ni el Juzgado de Santa Cruz, ni nuestra defensa entregó nada a nadie”, afirmó Grassi, quien si bien admitió que mantuvo reuniones con psicólogos “por propia voluntad” para realizar esa pericia, aseguró que el proceso “no se completó”.
De esta manera, Grassi respondió a la pericia publicada ayer, la que concluyó que “muchas de las características comportamentales que posee el sacerdote están presentes en personas que han cometido un delito sexual”.
El informe psicológico aseguró que las particularidades funcionales de la personalidad del sacerdote son propias “de una persona dependiente, compulsiva, con una característica estructural narcisista”.
Mencionó la dificultad del sacerdote “en el control de sus impulsos y una tendencia a actuar sin considerar adecuadamente las consecuencias de su accionar”.
La evaluación fue realizada por la psiquiatra Susana Mendoza y el psicólogo Gastón Lucas Mendicoa, miembro del cuerpo médico forense de la justicia de Santa Cruz. (Télam)
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