Profesionales de la salud piden se jerarquice su tarea en el aula

La ley que compete a su actividad data de 1998, pero nunca fue reglamentada

Sumar una mirada desde el campo de la salud a la escuela es cada vez más una necesidad. Es que según han manifestado en más de una ocasión cientos de docentes, hay tareas que escapan a las propias de la enseñanza y se vinculan con la ayuda y apoyo profesional para los alumnos. Y es entonces donde las figuras de los fonoaudiólogos, psicólogos y médicos, por ejemplo, entran a jugar un rol significativo.

De hecho contar con equipos interdisciplinarios de trabajo figura en varios de los reclamos que desde hace tiempo los maestros han hecho llegar a los distintos ministros. También hay proyectos para proponer normas a este pedido en la Legislatura provincial, pero que no han sido atendidos todavía.

Lo cierto es que las escuelas se ven cada vez más necesitadas de estos profesionales, tanto para apoyar la tarea de sus alumnos, como en la colaboración de los proyectos de integración que entre instituciones especiales y comunes realizan.

En este sentido, un grupo de profesionales señalan la necesidad de que las leyes que regulan su tarea en las escuelas sean atendidas. El pedido está dirigido particularmente a la ley Nº 11.614 promulgada en 1998 pero nunca reglamentada. En rigor, esta falta de reglamentación impide que los profesionales que integran los equipos interdisciplinarios de las escuelas especiales puedan hacer carrera dentro del área educativa y sean supervisados por personal de las disciplinas que ejercen, entre otras demandas.

Silvia Ingaramo (fonoaudióloga), María del Carmen Marín (Psicología), Rosa Petro (psicóloga), y Viviana Pappaseit (fonoaudióloga) son profesionales que integran estos equipos. Señalan que para poder avanzar en esta reglamentación, "es necesaria una reunión con la ministra de Educación Adriana Cantero".

Las profesionales insisten en esta instancia de diálogo con la titular de la cartera educativa santafesina como un posible avance en la regulación de la normativa que data de 1998.

Las razones de esta necesidad la fundamentan en poder jerarquizar la tarea que realizan en las escuelas, con los alumnos, los padres y los docentes. "Trabajamos en escuelas especiales, pero también aportamos al trabajo de integración que se realiza con la escuela común y en la atención a los niños con necesidades educativas especiales", dicen sobre algunas de las tareas que realizan. Sobre este aspecto advierten que su trabajo en la educación "no es medicalizarla, sino que estamos para generar proyectos de integración".

Por otra parte, las profesionales aseguran que a estos equipos de trabajo de la salud no debe considerárselos sólo para la emergencia, sino que hay que pensarlos en un sentido preventivo. De allí que insisten con la idea de incluir la mirada de la salud en la educación.

Entienden que atender este pedido de diálogo con el Ministerio de Educación, es una forma de atender también un derecho postergado por años. De paso recuerdan que su trabajo no se limita a los niños, sino que se extiende a los intercambios institucionales, talleres y jornadas de reflexión y orientación.

La ley Nº 11.614 ingresó a la cartera educativa santafesina en el 2003, para ser reglamentada en su aplicación. Mientras tanto, los profesionales que conforman estos equipos no cuentan con un supervisor de su especialidad que colabore en la tarea que realizan.