Mujeres a la escuela

¿Qué es el fuera de juego? ¿Por qué anuló el árbitro el gol? Estas y otras preguntas de difícil respuesta para muchas mujeres ya no se pronunciarán durante los 64 partidos del Mundial. O al menos esa es la intención de los cursos de fútbol para mujeres que se imparten en la localidad alemana de Wangen im Allgaeu.

  Fredy Charles Huckenbek, promotor de la idea, acaricia un ambicioso objetivo. “Queremos que las mujeres se sienten en las primeras filas durante el Mundial”. Ellas no deben quedar al margen cuando los hombres hablen durante semanas enteras sobre fútbol, opina el entrenador de 40 años. Wangen im Allgaeu, ciudad anfitriona del equipo nacional de Togo en el Mundial, oferta cursos intensivos alrededor de la pelota sólo para el mundo femenino que están teniendo una gran aceptación.

  “Las mujeres acuden incluso desde regiones lejanas”, cuenta la directora de los cursos, Belinda Unger. A toda velocidad, las mujeres aprenden teoría y práctica de todo lo que siempre habían querido saber sobre fútbol. O que deberían saber. Algunas participantes admiten con franqueza que fueron enviadas por sus maridos. “Mi esposo me dijo: «¿por qué no vas allí?»”, cuenta Renata, de 36 años, sonriendo. “Seguramente lo puse nervioso con mis preguntas”, admite.

  En los cursos intensivos no tendrá nada que temer porque todas las preguntas están permitidas. Angelika, de 47 años, quiere saber por qué se excita tanto su marido con las decisiones del árbitro. “Creo que se trata de fuera de juego. ¡Si supiera qué significa exactamente eso!”, cuenta.

  En el “fútbol para mujeres” se entera de esas y de otras muchas cosas, pues también se estudia la historia del fútbol así como tiros libres y córners, tarjetas amarillas y rojas, la indumentaria de los jugadores y las tareas de entrenador y árbitro.

  Julia, de 24 años, no sale de su asombro: “¿Cómo? ¿Tan grande es el arco? En televisión parece mucho más pequeño”. En este master concentrado de fútbol, las mujeres aprenden que como máximo sólo pueden sustituirse a tres jugadores, lo que es un gol de oro, el tamaño de la pelota y por qué se juega el descuento o qué es la defensa en línea de cuatro.

  El miedo al contacto con el mundo masculino desaparece con rapidez cuando oyen frases tranquilizadoras como: “El fútbol es en realidad un juego muy sencillo”. La curiosidad es ávida entre las asistentes y las preguntas se suceden con tal rapidez que el entrenador apenas puede responderlas.

Muchos maridos mandaron a sus esposas a tomar cursos de fútbol.