La policía habría matado "por pura venganza"

El fiscal de San Pablo Carlos Cardoso dijo ayer que el número de "sospechosos" que murieron por disparos de la policía como reacción a la ola de violencia provocada por grupos armados es exagerado, y que hay temor de que alguna de esas muertes haya sido "por pura venganza".

"Existe preocupación de que (la lista de nombres con los muertos por acciones de la policía y supuestamente vinculados al crimen organizado) la constituyan inocentes. Sabemos que sectores de la policía actúan fuera de la ley. Algunas muertes pueden ser producto de pura venganza", manifestó Cardoso.

Cardoso aseguró que el Ministerio Público investigará cada una de las muertes y analizará todas las pruebas técnicas recogidas por el Instituto Médico Legal (IML), ya que el número de muertos es excesivo. "El número de muertos es exagerado y es un récord para la policía paulista, que ya tiene una alta tasa de mortalidad en sus acciones", puntualizó.

El fiscal, que además es asesor de la Procuraduría General en el área de derechos humanos, llegó a considerar estas acciones policiales más graves que las ocurridas con ocasión de la llamada Masacre de Carandirú, donde 111 presos fueron asesinados por la policía militar en abril de 2001.

"Llega a ser más grave que los 111 de Carandirú, porque aquella fue una acción concentrada en un único lugar. Ahora las muertes ocurrieron en todas las ciudades, están desparramadas por todos lados", señaló. Cardoso dijo además que en su opinión el gobierno del estado de San Pablo ha perdido el control sobre el crimen organizado y ahora demuestra que también ha perdido el control sobre la policía.

"Eso no puede suceder. El Estado pierde legitimidad y sólo queda barbarie contra barbarie", concluyó.


No combatir el terror con más terror
A una semana del inicio de la considerada "mayor guerra urbana registrada en San Pablo", la pregunta que se impone en Brasil es hasta qué punto la reacción policial se enmarcó dentro de la legalidad, ante una cifra oficial de muertos que llega a 170 personas entre policías y presuntos criminales.

La no divulgación de la identidad y antecedentes penales de las 107 personas que la policía mató en la última semana siembra dudas sobre si se produjeron realmente durante enfrentamientos, tal como alega la fuerza, o si en algunos casos se cometieron abusos, como afirman varios testigos citados por la prensa.

El matutino Folha de Sao Paulo publicó ayer que desde el domingo solicita sin éxito oficialmente a la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) la lista completa, con nombre, edad y antecedentes criminales de los muertos en presuntos enfrentamientos con las fuerzas de seguridad.

Agrega que después de recibir durante seis días la respuesta de que "los datos estaban siendo consolidados y serían divulgados en breve", la SSP pasó a informar que la lista completa de las víctimas sólo será revelada en el "momento oportuno".