Corazón clandestino. Fito Páez y su balance del rodaje de "¿De quién es el portaligas?" en su último día de filmación en Rosario

"Filmé lo que tenía en la cabeza y conté una gran historia de amor"

El músico y cineasta destacó el apoyo que le dio la ciudad y resaltó que la gente se comprometió con el proyecto

Pedro Squillaci / La Capital

"Es un detalle descubrir el mundo", afirmó Fito Páez, cámara en mano, en el último día de rodaje en la ciudad de "¿De quién es el portaligas?", la segunda película de su autoría, que cuenta con la particularidad de tener a Rosario como escenario omnipresente.

La nota fue realizada el pasado fin de semana en un alto obligado de la filmación, a causa de una garúa insistente que se empeñó en postergar momentáneamente las escenas programadas en avenida Pellegrini al 200, frente a la Facultad de Ingeniería. Fito atendió a LaCapital en el motorhome estacionado por Ayacucho. Luego de abrir una botella de malbec roble, se dispuso a hacer un balance, mientras se acomodaba los rulos y fumaba un rubio.

"Es difícil hacer un balance porque hoy lo más importante es la toma que me falta (Leonora Balcarce andando en moto frente a la facultad, que terminaría de filmarse horas más tarde), pero lo que puedo decir es que hice la película que tenía en la cabeza", dijo Páez.

"No filmé una película de género, sino un trabajo con mucho de absurdo y con una idea muy lúdica. De lo que estoy seguro es que hice una gran historia de amor", desgranó al analizar su trabajo.

"Puedo decir que la película se parece mucho a mis discos, en esto de que pude observar el hecho cotidiano y reflejarlo a mi manera", destacó Fito. El músico y cineasta destacó el apoyo que le dio su ciudad natal: "Conté con la generosidad de la ciudad en todo momento. Pero creo que la gente se comprometió más con el proyecto que conmigo, y eso lo valoro mucho más todavía".

Páez aclaró que quiso contar una historia desde su ciudad "pero sin nostalgia ni chauvinismo" y porque le permitía la posibilidad de reencontrarse con cosas de su historia desde un costado sensible y legítimamente afectivo con el entorno.

Fito no eludió una respuesta cuando se le pidió una reflexión sobre su producción anterior, "Vidas privadas", donde aludía a un drama ocurrido en la dictadura militar, que estilísticamente está muy lejos a "¿De quién es el portaligas?". "Me debía contar esa historia, y me llevó ocho años hacerla. No fue nada caprichoso, pero quería contarla por mí y sobre todo por mis hijos", dijo el autor, padre de Martín, de seis años, y Margarita, de dos.

Tranquilo y reflexivo, Páez adelantó que la película tendrá su estreno mundial en Rosario, "como debe ser", en una fecha a confirmar en el año próximo. Fito fue contundente cuando se le preguntó si sentía la presión de la gente dado que tenía que hacer una buena obra por su condición de artista reconocido: "No es tema mío, eso corre por cuenta de la gente y su ideario sobre los artistas populares. Sólo grabo canciones y hago pelis, no me pidan más".

Fito, Rosario y la cámara, una postal habitual en los últimos meses.