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miércoles,
19 de
abril de
2006 |
Tratamiento del
doctor Crescenti
En el año 1994 fui operada de un cáncer de mama izquierda (cuadrantectomia y extirpación de ganglios), con posterior tratamiento de radioterapia con la siguiente consecuencia: 1) edema linfático en el brazo izquierdo, sin ninguna mejoría hasta el dia de la fecha a pesar de realizarme tratamientos para el mismo. 2) En el año 1995, luego de la aplicación de rayos, el resultado de una resonancia magnética y tomografía computada de tórax me da la siguiente conclusión: "Velamiento apical paramediastinal izquierdo con pérdida de volumen y broncograma aéreo, que teniendo en cuenta los antecedentes radiantes de la paciente se interpreta como secuelar...". Desde el año 200l tomo las medicaciones del doctor Crescenti, y quiero dejar bien en claro que jamás en su clínica me han dicho que debía dejar el tratamiento convencional. Me aclararon que no cura la enfermedad y que es un tratamiento complementario, que debo seguir con todos los estudios, controles, etcétera, que me indique mi médico personal. Gracias a Dios y las "gotitas milagrosas", durante mi tratamiento quimioterápico jamás sufrí vómitos, anorexia, descompostura de estómago, ni náuseas siquiera, y las defensas de mi organismo se mantuvieron elevadas. El tratamiento del doctor Crescenti no cura el cáncer, pero alivia las consecuencias de la enfermedad y del tratamiento convencional, que por un lado dicen que tratan la enfermedad, y por el otro, al ser un tratamiento invasivo, destruye células malignas, benignas y de paso, como en mi caso, también pueden destruir los pulmones.
Elida Nelly Alvarez, DNI 6.079.355
N. de la R.: La polémica por la terapia para el cáncer que promociona el doctor Ernesto Crescenti se desató el 8 de abril con una carta en esta sección del doctor Hugo A. Fornell, coordinador de la Unidad de Cuidados Paliativos de Adultos de la Secretaría de Salud Pública de Rosario, quien la calificó de fraude.
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