|
miércoles,
12 de
abril de
2006 |
Proponen cambios para la atención de la mujer embarazada
Diferentes estudios cuestionan las prácticas habituales en las salas de parto. Participaron médicos de todo el mundo, entre ellos un rosarino
María Laura Favarel / La Capital
Investigadores pusieron en jaque las prácticas habituales de los médicos en las salas de preparto y parto. Con datos científicos pudieron comprobar que la episiotomía, el rasurado y la enema, entre otras, no son conductas terapéuticas estrictamente necesarias. Profesionales de todo el mundo, coordinados por el National Institute of Healt (NIH), estudiaron por más de cinco años la utilidad de estas prácticas para la salud de la mujer y el niño. La semana pasada se presentó en Rosario la fase final de la investigación. De la presentación efectuada en la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Rosario participaron el doctor Pierre Buekens, de la Universidad de Toulane en New Orleans (Estados Unidos), y el doctor José Belizán, obstetra rosarino y único argentino que actuó como coordinador de la investigación.
Por primera vez una institución como la NIH de Estados Unidos abrió las fronteras para que investigadores de todo el mundo trabajen en forma conjunta. Con ese objetivo estableció una red global de investigación de la salud de la mujer y el niño, que integran 10 países del mundo. Uno de ellos fue la Argentina. Así es como 50 profesionales de la ciudad analizaron datos de cuatro maternidades de Rosario (Roque Saenz Peña, Centenario, Provincial y Eva Perón).
El médico rosarino José Belizán, miembro del Instituto de Efectividad Clínica y Sanitaria de Buenos Aires, en diálogo con La Capital, explicó que el objetivo de estos trabajos "es generar un cambio de conductas en busca de la mejora de la atención materno infantil".
Con la presentación de los resultados de los estudios a médicos locales los investigadores aguardan que los cambios se implementen rápidamente. "Los médicos rosarinos recibieron muy bien los resultados de la investigación", confirmó Belizán.
La mayoría de las mujeres consultadas manifestó que las prácticas habituales en las salas de parto "eran molestas", no obstante, muchas de ellas dijeron que si el médico las hacía era porque serían beneficiosas y consecuentemente "las aceptaban como apropiadas", explicó Belizán.
Uno de los estudios demostró la ineficacia de la episiotomía (corte del perineo, piel entre la vagina y el ano, que se practica con el fin de agrandar la abertura vaginal). Tanto en Estados Unidos como en Europa ya abolieron estas prácticas.
Parto acompañado
Entre todas las comprobaciones surgidas del estudio figura la confirmación de que el acompañamiento durante el trabajo de parto y el parto posee efectos positivos en la parturienta y el recién nacido. Efectivamente, diez investigaciones efectuadas en más de cinco mil mujeres demostraron que el apoyo psicosocial durante el trabajo de parto y el parto reduce en un 32 la frecuencia de cesáreas, un 34% las episiotomías, 16% el uso de analgésicos, y mejora en un 50% el estado del niño al nacer. A su vez, se comprobó fehacientemente que la mujer sufre menos la depresión posparto.
Para demostrarlo los especialistas incorporaron la figura de la "doula" (cuidadora, en griego) a la sala de preparto y parto. Al respecto Belizán explicó que la doula "es una mujer que puede ser la hermana, la mamá o alguien de la comunidad con experiencia en partos que las acompañaban, les hacían masajes en la espalda y les explicaban lo que estaba haciendo el médico", comentó Belizán.
Si bien existe una legislación nacional que permite el acompañamiento de la mujer en el parto, en Rosario aún la práctica no está difundida.
Los estudios realizados en red, además de reveer prácticas habituales, demostraron que la aplicación de una droga para contraer el útero disminuye la pérdida de sangre después del parto y evita la anemia en la parturienta. Si bien esta metodología no era de rutina, las causas por las cuales no se aplicaban era la falta de información respecto de sus beneficios.
En otro orden, el doctor Belizán comentó que uno de los estudios estuvo orientado a comprobar la utilidad del goteo durante el trabajo de parto. "No es necesario en todas las mujeres -dijo- sino en aquellas en las que es necesaria la utilización de la droga oxitocina".
La postura de la mujer durante el parto fue también tema de una de las investigaciones. Los especialistas observaron que muchas poblaciones indígenas del norte argentino tienen el bebé en cuclillas. Orientado en esta dirección se demostró que fisiológicamente esta postura dilata mejor la pelvis y mejora el plano y el eje de presentación del bebé para nacer.
enviar nota por e-mail
|
|
Fotos
|
|
Buscan generar cambios en la atención materno infantil.
|
|
|