Año CXXXVII Nº 49064
La Ciudad
Política
Economía
La Región
Información Gral
Opinión
El Mundo
Escenario
Policiales
Página Solidaria
Cartas de lectores



suplementos
Ovación
Salud


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 26/03
Mujer 26/03
Economía 26/03
Señales 26/03
Estilo 18/03
En el aula 18/03

contacto
servicios
Institucional

 miércoles, 29 de marzo de 2006  
Opinión: Cuando parece, pero no es

En la prestigiosa revista médica The Lancet, se publicó en 1995 como "nueva patología" el "síndrome de los recuerdos falsos", abordando el difícil problema de los que "recuerdan" haber sido víctimas de abusos sexuales en la infancia, sin que nunca lo hubieran padecido. El artículo referido, planteaba la capacidad de la memoria para distorsionar hechos, sobretodo con el paso del tiempo y la inducción de recuerdos falsos por ciertos interrogatorios psicológicos, médicos y legales.

Algunos investigadores denominaron y categorizaron este proceso como "recuerdos implantados". Lo mismo ocurre, cuando los medios de comunicación, insisten con el tema, ilustrando la alta frecuencia de abusos sexuales, ejecutados por familiares directos: padres, hermanos, abuelos o tíos... Habría que preguntarse si no es abuso, intentar prevenir instalando la desconfianza en un niño, que tanto necesita creer y "con-fiar", en sus seres queridos.

Ahora, en el caso de constatarse el abuso, es necesario provocar el relato, para ser tratado y resignificado. La "anamnesis" o interrogatorio, dirigido a un niño, requiere, técnicas especiales y muchísima experiencia, para no agravar el cuadro o instalar, justamente lo que se quiere evitar. También hay que tener en cuenta el contexto en que se lleva a cabo, (no debiera ser en los medios) y los gestos de quien obtiene los datos.

Los recuerdos falsos o los basados en experiencias verdaderas, se procesan en forma semejante, pero activan, según estudios realizados con técnicas actuales, zonas diferentes del cerebro.

Todavía me inclino, por prevenir enseñando a los seres humanos a nutrir los vínculos proximales y distales, con el afecto, el amor, la confianza, la esperanza y el mutuo conocimiento, en lugar de advertir sobre el horror que quizás nunca deba transitar, ni necesite inventar...

Mirta Guelman de Javkin

www.mirtaguelman.com.ar

Médica pediatra
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo


Notas Relacionadas
Abuso sexual en la infancia: hablar puede curar las heridas


  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados