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domingo,
19 de
marzo de
2006 |
El Racing del Cholo Simeone estuvo cerca de ganar pero...
Buenos Aires.- El Racing Club estuvo hoy a punto de conseguir su primera victoria desde que lo dirige Diego Simeone, pero sintió el esfuerzo y finalmente terminó sin goles el partido ante una versión conservadora de Lanús en el Cilindro de Avellaneda.
Este fue el quinto cotejo de Racing con el Cholo como entrenador y se nota que el rendimiento va de menor a mayor, ya que perdió ante Independiente, Olimpo y Boca Juniors, pero en su antecedente más próximo venía de mostrar síntomas favorables cuando empató 1-1 ante Rosario Central en el Gigante de Arroyito.
El primer tiempo fue lo mejor que hizo Racing en esta pobrísima campaña, aunque se notan progresos fecha tras fecha desde que lo dirige el Cholo.
El local mostró nuevas ideas ofensivas porque Juan Manuel Torres subió por la derecha cuando su equipo dispuso de la pelota y Maximiliano Moralez aportó su creatividad partiendo desde la izquierda.
Otra fórmula a la que recurrieron los albicelestes consistió en los remates del capitán Sebastián Romero desde fuera del área grande.
Además, Carlos Luna fue útil al recibir de espalda al arco rival para habilitar a los compañeros que pasaban por afuera.
El equipo del Cholo fue mucho más que un Lanús que se dedicó a esperar y especular con algún contraataque cuando consiguía un poco de respiro.
Racing fue el dominador del campo de juego y de la pelota durante todo el primer período y a Lanús le costó frenarlo.
En el granate fueron importantes los desempeños del arquero Carlos Bossio y del defensor Leandro Gioda, ambos clave a la hora de ponerle límites a la búsqueda del necesitado adversario.
Racing llegó mucho en la primera etapa, pero pecó por falta de definición.
Julio Barroso despaprovechó una ocasión a los 9, cuando remató cruzado y la pelota se fue rozando un palo. La habilitación había sido mérito del Chaco Torres.
Otra chance tuvo el anfitrión a los 28, cuando Moralez dejó a Lucas Valdemarín solo frente a Bossio, pero el disparo se estrelló en la cara del arquero.
A los 32 los académicos dispusieron de otra escena propicia, pero el envío de Torres, cruzado y rasante, pasó muy cerca de un poste. Esa situación se dio porque jugaron rápido un tiro libre y Romero mandó un centro adecuado.
Sin embargo, Lanús casi sorprendió a su rival con un contraataque por demás aislado, hasta los 34, cuando Santiago Biglieri llegó hasta el fondo y puso un centro peligroso para Marcos Aguirre, quien cabeceó y causó una excelente intervención de Gustavo Campagnuolo.
Pero Racing quiso la victoria y se jugó por ella. A los 37, Moralez arrancó desde la mitad de la cancha, pasó entre Agustín Pelletieri y Daniel Quinteros, encaró a los defensores centrales y disparó desde el borde del área, pero la pelota pasó cerca de la base del parante izquierdo.
Sobre el final de ese capítulo los de Avellaneda casi lograron el premio que merecían, porque hubo un tiro libre de Carlos Arano que cabeceó Moralez, pero Bossio respondió con una volada formidable.
En la segunda mitad Racing sintió el desgaste y cuando tuvo que recurrir a los cambios su capacidad se resintió. Lo afectó mucho la salida de Moralez (molestias musculares), quien a los 14 minutos fue reemplazado por el chileno Milovan Mirosevic.
Además, la falta de definición de Racing terminó por sepultar el partido cuando todavía quedaba media hora de juego.
Romero y Raúl Estévez (entró por Valdemarín, a los 26) buscaron la solución al problema hasta el desenlace, pero Lanús defendió el punto como si se tratara de un tesoro.
Hubo una acción que generó dudas, a los 16, cuando dio la impresión que Eduardo Ledesma le cometió una infracción a Mirosevic dentro del área, pero los reclamos fueron menores.
En definitiva, Racing experimentó una mejoría, pero, con Bossio a la cabeza, Lanús lo privó del festejo que tanto ansía y precisa con urgencia. (DyN)
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