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 sábado, 18 de marzo de 2006  
Sin luz. La caída de columnas y el corte de los cables dejó sin energía a más de ocho mil usuarios
Severos daños materiales por una fuerte tormenta en Paraná
Vientos de 120 kilómetros por hora arrancaron árboles y postes de alumbrado. Hay 50 familias evacuadas

Paraná.— El diluvio que afecta desde el jueves a la zona central y el Litoral del país causó ayer severos daños en las provincias de Entre Ríos y Santa Fe, donde decenas de familias debieron ser evacuadas, algunas hospitalizadas y se registraron daños materiales.

  Paraná, la capital entrerriana, amaneció ayer con un panorama desolador en el extremo sudoeste de la ciudad, donde una fuerte tormenta de viento, lluvia y granizo destruyó viviendas, anegó calles, interrumpió el suministro eléctrico y provocó que 50 familias se autoevacuaran.

  El gobierno de Entre Ríos estimó que a las 5.30 los vientos alcanzaron una velocidad de entre 110 y 120 kilómetros por hora, cuando el temporal entró en “etapa tornádica”, e informó que entre 80 y 90 centímetros de agua cayeron en pocas horas junto a granizo de cuatro centímetros de diámetro.

  Hasta la tarde de ayer, la situación en Paraná no había mejorado mucho, aunque la administración de Jorge Busti aseguró que “los mecanismos de emergencia sanitaria están funcionando sin desbordes”.

  La caída de postes y corte de cables dejó sin electricidad a unos ocho mil usuarios, mientras decenas de casas y tinglados perdieron sus techos y una gran cantidad de árboles quedaron tumbados en las calles.

  Organismos provinciales y municipales trabajaron en conjunto con los vecinos para retirar ramas y hasta árboles enteros que fueron arrancados por la tormenta, en tanto la Municipalidad habilitó nuevos números telefónicos para formalizar pedidos de auxilio y reclamos.

  El director de Vialidad Provincial, Santiago Gaitán, informó que se dispuso apoyar logísticamente con equipos para trasladar a damnificados, y el titular de la Empresa de Energía, Carlos Molina, aseguró que diez cuadrillas trabajaban para restablecer el servicio.

  “Las lluvias y tormentas intensas continuarán por lo menos hasta esta noche (anoche) en la zona central del país, informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), que reiteró ayer el alerta para el sur de Corrientes, centro y norte de Santa Fe y Entre Ríos. Las condiciones climáticas tenderán a mejorar por los vientos leves del sur cambiando a moderados del sudoeste, que arrastrarán el foco de tormenta de sur a norte, por lo que a partir de anoche las lluvias cesaron, según se informó.

  El intendente de Paraná, Julio Solanas, manifestó que es desolador el panorama en la zona sudeste de la capital entrerriana, donde el temporal provocó voladura de techos, caída de árboles y dejó sin energía eléctrica a 8.000 pobladores.

  Tras el paso del temporal, el jefe comunal visitó el barrio Santa Lucía. “Es desolador ver esta zona y la enorme cantidad de gente que sufrió voladuras de techos, caída de árboles, casas destrozadas y familias inundadas”, dijo el intendente tras la recorrida.

  El funcionario señaló que luego de recorrer la zona afectada y evaluar el estado de situación dispuso el inmediato envío de colchones y chapas para auxiliar a los afectados. Precisó que también ordenó que la patrulla sanitaria se constituya en el lugar debido a que se constató que existen numerosos chicos y ancianos que necesitan atención médica, debido al enfriamiento que sufrieron al mojarse con el agua de la lluvia, por la voladura de los techos de numerosas viviendas.

  Solanas reconoció que la gente de la zona sur de Paraná “está angustiada y desesperada” y afirmó que el municipio “desde temprano dispuso la formación de cuadrillas con agentes de todas la direcciones municipales, con las que está colaborando el Ejército para ayudar a la gente”.

  Una mujer del barrio Santa Lucía relató al periodismo que en el momento de mayor intensidad del temporal el techo de su vivienda fue arrancado de cuajo. “En ese momento se formó dentro de la casa una especie de embudo, que levantó a mi hijo de 3 años hasta una altura de casi tres metros y luego lo dejó caer nuevamente sobre su cama”, dijo la mujer al relatar la angustiante experiencia que le tocó vivir durante la tormenta.

  Por su parte, el presidente de la Empresa de la Energía (Enersa), Carlos Molina, dijo que el viento “evidentemente fue muy fuerte porque levantó dos postes de hormigón y cortó cables de media tensión, de gran grosor. No obstante, el funcionario ratificó que, a pesar de la magnitud de los daños materiales provocados por el temporal, “no hubo accidentes con los cables de energía cortados”.


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La zona sudoeste fue la más afectada en la capital entrerriana.

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