Ponen fin a un conflicto laboral en San Jorge

Luis Emilio Blanco / La Capital

San Jorge.- El conflicto de la firma Luciano Hnos. que llevó a los empleados a tomar las instalaciones que la compañía posee en esta ciudad, llegó a su fin luego de que durante la mañana del décimo día de ocupación pacífica, se presentara el presidente del directorio, Jorge Luciano, y pagara en efectivo una parte de lo adeudado a los trabajadores. El empresario llegó a las instalaciones poco después de las 10.30 del jueves y revisó su vivienda y la fábrica, junto a su representante legal y al de los empleados, con una fuerte custodia policial.

Después de cerciorarse de que todo estaba en orden -salvo las fachadas de la vivienda y de la compañía que presentan pintadas en aerosol y restos de cubiertas quemadas-, recibió de mano de los trabajadores las llaves de las instalaciones para después trasladarse a la delegación San Jorge de la Secretaría de Estado de Trabajo y Seguridad Social. Allí, después de una tensa espera en el mismo salón en el que se encontraban los empleados, se rubricó un acuerdo mediante el cual Luciano se comprometió al pago parcial de lo adeudado, exigió el cese de la ocupación y eximió a los obreros de presentarse al lugar de trabajo hasta nuevo aviso.

Si bien la medida alcanzó a una parte de los trabajadores (diez de los veinticuatro que ocupaban en los últimos tiempos la fábrica), los restantes hicieron acuerdos personales o se dieron por despedidos para iniciar acciones legales. Poco después de firmar el convenio, el asesor legal de la empresa, Alejo Jeremías, concretó el pago de una suma fija, 1.820 pesos por empleado, para cubrir una parte de lo adeudado a cada uno.

Si bien tanto Luciano como Jeremías evitaron hacer declaraciones, dejaron constancia en el documento firmado que "la situación de la empresa desde hace cuatro años es grave y precaria", con lo cual justificaron el atraso de salarios y otras deudas que desencadenaron el conflicto. Además manifestaron que no pueden definir si la fábrica seguirá en funcionamiento.

Por su parte, los trabajadores hicieron las reservas de derechos de rigor para dejar en claro que la situación llegó a puntos límite por culpa patronal y que depusieron la ocupación pacífica de las instalaciones. Posteriormente la autoridad laboral fijó una nueva audiencia para el 29 de marzo a las 10, para definir la relación entre las partes.