Entrevista. María Eugenia Bielsa descargó críticas sobre el socialista

"Binner trabaja como candidato a gobernador, no de diputado"

Aseguró que los reproches opositores al presidente Kirchner dirimen un mismo espacio político

Silvia Carafa / La Capital

"La oposición critica lo que le hubiera gustado hacer", aseguró la vicegobernadora María Eugenia Bielsa. Además de aludir a mecanismos inconscientes, el análisis dio cuenta de que las críticas al oficialismo dirimen un mismo espacio político.

"Creo que el sector progresista está contenido en el 80 por ciento de adhesión popular al presidente Néstor Kirchner", evaluó Bielsa. Y abogó por una actitud generosa de los adversarios a fin de que no vean la realidad en una pantalla distinta de la que miran los ciudadanos.

Tras afirmar que "todos debemos cumplir el cargo para el que fuimos elegidos", Bielsa calibró la idea para referirse al socialista Hermes Binner: "En lugar de trabajar de diputado nacional por Santa Fe, lo sigue haciendo como candidato a gobernador"

-¿La actividad política sacó el piloto automático característico del verano?

-Estamos empeñados en recuperar la relación con los santafesinos. Hicimos una lectura de las elecciones del 2005 y no es tiempo de confrontaciones políticas, las que nunca deberían darse a costa de la función de gobierno. Trabajamos, ponemos un enorme esfuerzo, y creo que eso adquiere dimensiones políticas porque supone discusiones por logros alcanzados o no, en el debate con otros partidos.

-Se afirma que no es un año electoral pero se habla de campañas. ¿Binner salió a recorrer la provincia?

-En lugar de trabajar de diputado nacional por Santa Fe, Binner lo hace como candidato a gobernador. Ocurrió lo mismo durante su campaña. Quisiéramos saber cuáles son las ideas que tiene respecto del desarrollo provincial en su conjunto y las leyes que piensa plasmar en el Congreso. La oportunidad de ser gobernador debería discutirse en el 2007 y no ahora. Es importante que cada uno de nosotros cumpla los cargos para los que fuimos elegidos. Más aún Binner, quien fue electo por cuatro años y recién inicia su período.

-El ya habló de un posible contrincante para la Gobernación: mencionó al senador nacional Carlos Reutemann.

-Me parece una suerte de contradicción. Leí una declaración suya en la que sostenía que iba a cumplir con su mandato, una norma de bien dentro de la política. De todos modos, lo juzgarán los ciudadanos a la hora de poner el voto. Por lo pronto queremos dedicarnos al cargo para el que fuimos designados.

-¿Cuál es su opinión sobre las declaraciones del intendente cordobés, Luis Juez, quien dijo que Rosario resistió 23 años de corrupción de gobierno justicialista?

-Le respondió muy correctamente el presidente del justicialismo santafesino, Norberto Nicotra, quien aseguró que, cuando hubo personajes sospechados de corrupción, estuvieron presos, y que sus causas fueron enviadas a la Justicia por el propio PJ. Creo que no ocurrió lo mismo cuando se plantearon denuncias en Rosario por la experiencia con el Programa Habitar o sobre las concesiones de la costa. Lo que hizo el partido del gobierno municipal fue ordenar la situación de las concesiones, pero no impulsó las causas en la Justicia. Me enorgullezco de pertenecer a una administración en la que no hubo una sola denuncia de corrupción formalizada.

-La secretaria general del radicalismo, Margarita Stolbizer, calificó de "falso progresismo" al gobierno de Kirchner.

-Tengo dos sensaciones. Una es que la oposición no encuentra su espacio y, en la voluntad de construir para diferenciarse del gobierno, ensaya agresiones. La verdad es que lo que opinan no se condice con el apoyo ciudadano al presidente, que tiene el 80 por ciento de popularidad. Ahí también están contenidos los sectores progresistas. La otra sensación es que la oposición hubiera querido hacer lo que está haciendo Kirchner en algunos temas. Días atrás escuché por primera vez a (la flamante secretaria de Cultura municipal) Chiqui González, en una reflexión generosa que, según creo, es un ejemplo. Dijo, respecto de la Secretaría de Cultura de la provincia, que si la convocaban para competir con otro, no era la persona indicada, porque pensaba complementar. En la medida en que esté de acuerdo con el gobierno, la oposición debería decirlo para tener administraciones plurales, de unidad. Una oposición puede marcar errores y promover opciones superadoras, pero cuando está de acuerdo también debería decirlo.

-¿Su propia experiencia parlamentaria sustenta esa posición?

-En la Cámara que presido (el Senado provincial), en general, la oposición vota en contra o se abstiene. Creo que lo que deberían hacer es presentar proyectos superadores, porque abstenerse no es una decisión. La oposición tiene que madurar y encontrar su rol justamente en lo que los santafesinos necesitan, que es construir hacia delante. Cuando la oposición se convierte en destructiva, también pierde: el ciudadano deja de escuchar. La oposición dice que el gobierno de Kirchner es hegemónico, corrupto, que pagó por los votos para aprobar la reforma del Consejo de la Magistratura, pero resulta que tiene el 80 por ciento de adhesión popular. Quiere decir que los ciudadanos y la oposición están viendo la realidad en televisores diferentes.

-¿Los ciudadanos sintonizaron con el debate por la Magistratura?

-De hecho, los ciudadanos tienen problemas del día a día y no ponen los ojos en eso. Si bien la consolidación de los procesos institucionales son importantes, no creo que sea un tema que pueda dañar la garantía de funcionamiento democrático de la Justicia. Respecto de los problemas del día a día, algunos criticaron que Kirchner se haya puesto al frente del combate contra la inflación. La Argentina muchas veces vio en riesgo la democracia por la inflación, así que no es un tema menor.

La vicegobernadora no ahorró críticas a Binner.