Saquearon una casa mientras sus dueños estaban durmiendo

Los intrusos robaron dinero y aparatos de un almacén que funciona en la vivienda

Una casa de barrio Bolatti en la que funciona un almacén fue vaciada ayer a la madrugada por asaltantes que ingresaron mientras los dueños de la vivienda y sus cuatro hijos dormían. Los ladrones entraron luego de romper un vidrio del frente y, sin que las víctimas escucharan ruido alguno, se llevaron tres balanzas electrónicas, una cortadora de fiambre, un televisor color y la caja registradora del negocio con 200 pesos en efectivo.

Ayer a la tarde Gabriel Cabral, de 28 años, no podía entender cómo pudieron robarle en las narices los electrodomésticos más importantes de su casa sin que ningún integrante de su familia escuchara ruidos extraños. El joven, que trabaja 12 horas diarias como mozo en un bar del centro, se despertó a las 8.30 cuando uno de sus cuatro hijos le avisó que la puerta de calle estaba abierta.

"Estaba todo roto y desordenado. En la granja habían tirado toda la mercadería al piso y la puerta del frente estaba abierta. Cuando miré hacia la ventana me di cuenta de que no estaba el televisor", narró Gabriel en su casa de Solís y Biedma, ubicada frente al Fonavi de Rouillón y Seguí. En el frente de la vivienda funciona un almacén que atiende la esposa del mozo, Carolina, de 25 años. La pareja vive allí desde hace un año y seis meses con sus cuatro hijos de 9, 6, 4 y 1 años.


Aerosol
Según comentaron algunos vecinos a la pareja, por la puerta del negocio ingresaron la madrugada del sábado "unos seis hombres". Los intrusos rompieron un vidrio de esa abertura del almacén y por allí entraron al negocio. Para facilitar el ingreso colocaron un banquito bajo ese hueco. Luego entraron al comedor de la casa y abrieron por dentro la puerta que da a la calle. Por allí sacaron los electrodomésticos. Además del televisor color que estaba en esa habitación se llevaron 3 balanzas electrónicas del local, una pesada cortadora de fiambre, dos celulares, el bolso que usa Gabriel para ir a trabajar y la caja registradora con unos 200 pesos.

La pareja no lograba explicarse cómo pudieron saquearlos sin que ellos escucharan la presencia de extraños a metros de su dormitorio. "Pensamos que nos pudieron haber echado alguna sustancia, como el aerosol que usan para adormecer a los perros, porque los dos nos despertamos con dolor de cabeza y la beba no lloró en toda la noche", contó el muchacho. El primero en despertarse fue uno de sus cuatro hijos, quien al notar que la puerta estaba abierta fue a llamar a sus padres.

Los policías que fueron a recorrer la casa de barrio Bolatti en busca de rastros también le plantearon a Gabriel que los asaltantes podrían haber arrojado alguna sustancia adormecedora. "Pensamos que entraron entre las 4.30 y 5 de la mañana porque a esa hora se levanta mi papá, que vive al lado, para ir a trabajar", señaló el joven, a quien algunos vecinos le comentaron que vieron seis personas transportando electrodomésticos a pocas cuadras de allí. "Estamos angustiados pero sabemos que sólo perdimos cosas materiales. Peor hubiera sido si nos despertábamos, encontrábamos a los tipos y se armaba una hecatombe", expresó el joven.

Gabriel cree que echaron un gas en al habitación