Tragedia de Núñez

Hermana de niña violada se opone a la pena de muerte

Buenos Aires.— “Este hombre debe pasar hasta el último día de su vida en la cárcel. Yo tengo un pensamiento muy claro sobre la pena de muerte y no lo voy a cambiar por esto. La brutalidad de los demás no nos debe embrutecer a nosotros como sociedad”. La afirmación la hizo ayer Sandra Calvo, hermana de la nena de 13 años violada por un vecino en un departamento del barrio porteño de Núñez poco después de que el hombre asesinara a su madre, en relación a Claudio Alvarez, el imputado del brutal hecho.

  Las declaraciones de la joven fueron hechas tras declarar por tres horas ante la jueza que investiga el episodio. En ese mismo trámite judicial, Calvo también fue aceptada como querellante en la causa.

  En su relato ante la jueza María Cecilia Perzan, Calvo sostuvo que Alvarez —vecino del departamento donde vivían sus familiares— entró con un pañuelo “tipo piquetero” haciéndose pasar por ladrón, pero su hermana lo reconoció “por la voz” y luego confirmó su certeza cuando el sujeto se descubrió el rostro para verla. Además, aseguró que cuando ella arribó horas después preocupada a la casa y no pudo abrir la puerta, el acusado se asomó al pasillo de la casa y le ofreció usar su teléfono para llamar a la policía.

  Sandra Calvo añadió que mientras ella llamaba a la comisaría, el hombre se comunicó con su celular con su pareja para “hacer montar un teatro y preguntarle a los gritos dónde estaba ella y su hijo porque estaba preocupado por las cosas que pasaban”, dijeron las fuentes.

  “Cuando vi que mi mamá no venía al trabajo y no contestaba los llamados, supe de inmediato que algo muy malo les estaba pasando. Pero nunca me imaginé que podía llegar a ser algo tan malo como lo que encontré”, dijo conmovida Calvo.

  La joven pidió a la Justicia ser querellante y solicitó que se garanticen las medidas existentes para detectar si su hermanita pudo haber sido infectada con el virus del sida, porque —explicó— “si una persona tiene antecedentes de esta naturaleza es fácil suponer” esa hipótesis, “aunque puede pasar en cualquier relación donde no hubo preservativos”.

  Calvo admitió ante la prensa que su madre le tenía cierto “temor” a Alvarez, pero “no se sentía especialmente amenazada” ni “había un prejuicio respecto a él (acusado)”. Siempre decía: “Es raro ese tipo, anda siempre mirando para abajo”, pero ella le sugirió habiendo estado en la cárcel no debía ser fácil salir a la calle.

  Todo ocurrió hace una semana en un departamento de 11 de Septiembre al 3500 de Núñez, cuando un hombre sorprendió a Elsa Escobar y su hija mientras dormían. El atacante irrumpió por los techos a la madrugada y estuvo allí cuatro horas. Con la cara cubierta exigió 200 pesos a la mujer y esta le dio los 40 pesos que tenía, pero el sujeto encerró a la nena en el placard, atacó y mató a puñaladas a la madre y luego sometió sexualmente a la pequeña, a la que también acuchilló.