La ministra Cantero dice que la educación sexual no será una materia aparte

Señaló que trabajará como un "contenido transversal". Hay casos de embarazos precoces en los séptimos años de la EGB

Mirta Carpino, la directora de la escuela técnica, advierte que antes los casos de embarazos se registraban en el último tramo de la secundaria. En cambio desde hace un par de años ya alcanzan a las adolescentes que cursan el 9º.

"Hace unos 5 años -cuenta la directora- los embarazos los registrábamos en el último curso del secundario, ahora se dan mucho antes. Este ciclo tuvimos el caso de una nena de 15 años y que lamentablemente dejó la escuela".

Según confiesa, siente que "siempre se llega tarde con la información". "Hace falta capacitación para los docentes, no es nada fácil atender a la educación sexual", dice la docente, al tiempo que también reconoce la urgencia por darle más atención al tema.

Al testimonio de Mirta Carpino se suman los de otros docentes y directivos que reconocen que en sus escuelas ya se han registrado embarazos en los 7º años de la EGB, es decir con alumnas que rondan los 12 años.

El tema también fue desarrollado en una investigación que encabezaron alumnas de la Escuela Técnica Nº 683 de Rosario y que fue publicada en la edición de LaCapital del domingo 5 de diciembre. Por su trabajo, las alumnas ganaron en Santa Fe el concurso "Periodistas por un día", que organiza el Ministerio de Educación de la Nación.

El panorama plantea una vuelta más sobre el lugar de la educación sexual en las escuelas.

Si bien desde 1998 existe una ley provincial sobre el tema, luego reglamentada para ser aplicada en los distintos niveles, aún es una asignatura pendiente en las aulas santafesinas.

"La educación sexual es importantísima para las personas y dentro de esta enseñanza el ejercicio del respeto, de la no violencia, del diálogo", dice el subsecretario de Salud provincial, Guillermo Kerz. Y por eso cree que el sólo hecho de hablar de educación sexual ya marca un avance, un paso fundamental en esta discusión.

A su vez, la ministra de Educación Adriana Cantero recuerda la vigencia de la ley aprobada en el 98. En su visión esta enseñanza -y en contraposición a lo que se había anunciado en la gestión de la ex ministra Carola Nin- debe ser tomada como un contenido transversal y no como una materia.

Si bien para muchos pensar en espacios separados para atender a la educación sexual parece algo complejo de implementarse, para otro tanto no es muy convincente hacer de esta enseñanza un contenido transversal (por tal término se entiende que está presente en todas las áreas).

La desconfianza no es casual. Muchos docentes y alumnos han experimentado cómo en nombre de lo transversal nadie se termina haciendo cargo de atender esta demanda y la misma se diluye en el debate diario.

Al respecto, Adriana Cantero señala que desde el 2006 "se activará en las aulas la enseñanza de los contenidos transversales, dándoles un fuerte impulso, porque -señala la ministra- se trata de temas que tienen un gran impacto social y por tanto deben desarrollarse".


Datos que asustan
Transversal o no, los datos recogidos por distintos organismos indican que la educación sexual no admite más demoras. Por ejemplo, Unicef de Argentina (en un informe publicado por Periodismo Social) señala que la mayoría de los embarazos adolescentes no son planificados y pueden deberse a varios motivos, aunque la coincidencia de los expertos indica que una de las razones más importantes es la falta de información adecuada sobre la sexualidad y el cuidado del cuerpo, y la dificultad para acceder a los métodos de prevención.

En su momento el ex ministro de Salud Juan Sylvestre Begnis había llamado la atención sobre el dato que confirma que en "la provincia el 17 por ciento de las embarazadas son menores de 18 años", una cifra que se duplicó en los últimos diez años. Según recoge LaCapital del 24 de febrero de 2005, el ex ministro calificó de "elevadísima y preocupante" la cifra y defendió a ultranza la implementación de la educación sexual en todo el territorio provincial.

De hecho, Sylvestre Begnis ha sido uno de los funcionarios que más fervientemente ha defendido esta educación en las escuelas y que sin reparos puso en debate la rémora con la que la enseñanza se encara con los alumnos.

Ahora, su sucesora, Silvia Simoncini, también ha mostrado públicamente su preocupación para que se haga efectiva esta educación. Por lo pronto prometió reunirse con su par de la cartera educativa para consensuar el trabajo en las escuelas.