El cazador oculto: "Las chicas sólo quieren pantalla"

La bomba estalló una semana atrás, durante la fiesta de cumpleaños de Canal 5. En los rincones se cuchicheaba sobre la repentina desaparición de la pantalla de Julito Orselli. La versión que sonaba más fuerte era que se había ido de viaje al Tíbet para hacerse un tratamiento de rejuvenecimiento, aunque después se supo que no era así. Que a sus "chicas", como el animador gusta llamar a sus fans parafraseando al Gitano, las arrugas que se forman alrededor de sus ojitos tiernos cuando sonríe les parecen supersexys. Pero la noticia explosiva de la noche, más allá de las especulaciones sobre el futuro de "De 12 a 14", fue la partida de Erica Fontana a Buenos Aires para conducir el noticiero del mediodía de Telefé. Pasaron segundos nomás para que, ante la sorpresa inocultable de propios y extraños, comenzaran los preparativos para la sucesión de la corona real. Lo curioso fue que, a la luz de las ansiedades que desató en la comunidad mediática, el cetro se reveló codiciadísimo y las intrigas palaciegas que se tejieron para apoderarse de él resultaron dignas de la revista "Hola". O mejor, de un capítulo especial de "Ambiciones". Porque, desde que en la sección "En voz baja" de este diario se publicó la buena nueva, los teléfonos de la emisora de avenida Belgrano se pusieron al rojo vivo. Y las cercanías del canal se poblaron de caras bonitas, escotes profundos y mohínes sensuales. Como en la pasarela de un diseñador de modas, desfilaron movileras con aires de diva de los almuerzos, conductoras de envíos culturosos de fin de semana y animadoras de programas de cable empeñadas en jugar en las ligas mayores. También, aunque usted no lo crea, una que otra vieja gloria de la pantalla que, sin darse cuenta de que en la televisión el tiempo es aún más veloz que en el espejo, aún sueña con ser una estrella. Pero eso no fue todo, sin que nadie supiera a ciencia cierta cómo se enteró de la vacante, bajó desde la Gran Capital una morocha de voz gruesa y movimientos felinos capaz de devolver a la vida a los muertos. En el canal lo niegan todo. Todo. No quieren tener problemas al volver a casa. Se entiende. Todos sabemos de lo que son capaces las mujeres cuando quieren algo. Y, hay que admitirlo, sentarse al lado de Ariel Bulsicco, el soltero más codiciado de la pantalla vernácula, es un sueño.