El alma colmada

Myriam Cortés hace 16 años que teje y cuenta que para ella es un placer ya que siente que "le llena el alma". "Soy muy ansiosa y este trabajo lleva su tiempo, te pasás horas tejiendo y parece que estás en otro mundo, otro tiempo", explica. Desde su perspectiva, participar del grupo le permitió plasmar ideas que ya manejaba, a además de generar proyectos comunes con sus pares. Myriam relata que ella es de Casilda y que en su ciudad hacía tiempo que venía buscando un espacio para capacitarse, así que cuando se enteró del programa no dudó y se sumó. "La idea es poder vender lo que hacemos en forma conjunta", se entusiasma.