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domingo,
27 de
noviembre de
2005 |
Editorial
La provincia en roles protagónicos
Más allá de coincidencias ideológicas o simpatías partidarias debe destacarse el importante papel que desempeñarán en la Cámara baja de la Nación dos santafesinos, Agustín Rossi y Hermes Binner, quienes tendrán la responsabilidad y el honor de presidir los bloques del justicialismo y el socialismo.
Muchas veces se ha afirmado o escrito que la provincia de Santa Fe carece de una dirigencia política acorde con su real importancia dentro del territorio argentino. Y de inmediato se procedía a compararla con su vecina y "rival" Córdoba, que supo dar presidentes de la República y también numerosos ministros a las gestiones gubernamentales nacionales de las últimas décadas. Sin embargo, en su edición del jueves los diarios reflejaron dos noticias que señalan una valiosa reversión de esta tendencia: es que serán dos santafesinos quienes presidan los bloques del justicialismo y el socialismo en la Cámara de Diputados, uno rosarino nativo y el otro nacido en Rafaela pero dos veces intendente de esta ciudad. Agustín Rossi y Hermes Binner serán quienes ostenten tal privilegio.
Sin dudas debe ser evaluado como impactante el salto en la carrera política de Rossi, quien ahora tendrá la impensada responsabilidad de conducir el mayoritario bloque oficialista en la Cámara baja cuando poco tiempo atrás sólo aspiraba a renovar su banca en el Concejo Municipal rosarino, al cual presidió. Pero las negativas de la vicegobernadora María Eugenia Bielsa y el ex ministro de Justicia Horacio Rosatti a encabezar la lista del Frente para la Victoria en las últimas elecciones lo colocaron insospechadamente en un lugar que supo aprovechar al máximo, haciendo un digno papel tras trabajar duro y ganándose así el reconocimiento pleno de Néstor Kirchner, quien confió en él para la crucial tarea que ahora se le ha asignado.
Acaso más previsible, el caso de Hermes Binner también merece sin embargo ser valorado: el contundente triunfador en los últimos comicios es la carta fuerte que su partido jugará en las elecciones a gobernador de 2007 pero por ahora se dedicará a liderar el pequeño bloque de diputados nacionales del socialismo, compuesto por cinco legisladores. Afín en no pocos aspectos con la gestión kirchnerista, el ex intendente se preocupó sin embargo de fijar los límites de ese apoyo y negó de plano la posible conformación de un interbloque.
Pero más allá de los aspectos puntuales de la tarea que ambos deberán asumir a partir del 10 de diciembre próximo, debe rescatarse ante todo el nivel de protagonismo que tendrán quienes hasta hace pocos días eran actores principales, sí, pero dentro de un escenario más pequeño. Será, sin dudas, en beneficio y para orgullo de Rosario y la provincia -dejando de lado coincidencias ideológicas y simpatías partidarias- el que desempeñen su rol con la eficacia que de ellos, con fundamento, se espera. Ojalá sea de ese modo.
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